DEPORTES:Argentina reprobó su segundo exámen en la Copa América
La selección argentina reprobó su segundo examen en la Copa América.
En Santa Fe, ante un estadio repleto que pasó de la euforia a los reclamos, el equipo argentino no pudo contra Colombia, fue un pobre 0-0 que dejó una sensación de derrota por la floja actuación, y el próximo lunes ante Costa Rica, decidirá su futuro.
Sin ideas en ataque y con serios desacoples defensivos, la selección se quedó con las manos vacías y tuvo en Romero, el arquero, la figura que salvó en varias oportunidades la caída del arco argentino. Cuando no apareció Romero, los propios jugadores colombianos ayudaron a la selección para no ganar
El futuro de la Argentina en la Copa América se definirá el lunes, en Córdoba, ante la Costa Rica de Ricardo Lavolpe.
Por ahora la selección está segunda con tiene dos puntos, Colombia está primera con cuatro, Bolivia uno y Costa Rica cero, estos dos, jugarán mañana.
Que la figura de la noche haya sido Sergio Romero, enciende la alarma en la selección. En varias oportunidades salvó el cero en su arco: a Moreno, a Falcao y a Teo Gutiérrez les ahogó sus gritos.
La más clara igual la tuvo Dayro Moreno a los 25 del primer tiempo, pero solo contra el arco, la tiró afuera.
Volvió a tener un flojo rendimiento Lionel Messi. La Pulga no tuvo socios, ni Banega ni Cambiasso, y a diferencia del partido con Bolivia, bajó poco a buscar la pelota. Tevez, Lavezzi, Agüero y hasta Higuaín jugaron, pero ninguno cumplió.
Otro mal partido tuvo la línea defensiva. Milito y Burdisso fallaron en la marca y hasta regalaron pelotas a los delanteros colombianos. Ni Zabaleta ni Zanetti pudieron desbordar, y Mascherano no tuvo el rendimiento de otros partidos.
Apenas dos jugadas claras de peligro tuvo la Argentina. En el primer tiempo, una habilitación de Messi a Lavezzi, que definió al cuerpo del arquero. En el segundo, Higuaín probó de media vuelta, con otra buena respuesta de Martínez.
En Santa Fe, la selección defraudó y el público reprobó su actuación. Lo que empezó siendo una fiesta, terminó con silbidos que salieron de los cuatro rincones para notar el malestar por el flojo partido.
El lunes, el último examen para decidir el futuro.
Pero asi no va. Por Luis Sangiorgio
