EN EL MEDIO DEL MUNDIAL DE FÚTBOL DE QATAR SE DEFINIRÁN LAS CAUSAS QUE MÁS PREOCUPAN A CRISTINA KIRCHNER
En noviembre se conocerá el veredicto en el juicio por corrupción del caso Vialidad; cerca de la final de fútbol se sabrá si se reabren los casos por el Pacto con Irán y Hotesur y Los Sauces, donde también están acusados sus hijos
Cuando la pelota empiece a rodar por el campo de juego del estadio Al Bayt, para el partido inaugural del Mundial de Qatar 2023, el 20 de noviembre, se dará la temporada alta en los tribunales federales de Comodoro Py 2002 para definir las causas por corrupción que enfrenta Cristina Kirchner.
En ese mes mundialista, entre noviembre y diciembre –y a juzgar por cómo se viene dando el calendario de las audiencias– se conocerá el veredicto en el juicio por corrupción que enfrenta la vicepresidenta en la causa de Vialidad, donde el fiscal Diego Luciani ya pidió una condena de 12 años de años de prisión.
En esos mismos días vencen los plazos procesales para que la Justicia defina si se mantiene firme o no los sobreseimientos de Cristina Kirchner en el caso por la firma del Memorandum con Irán y en la causa Hotesur y Los Sauces. En ambos expedientes, la Sala I de la Cámara de Casación debe decidir si deja firmes los sobreseimientos de la vicepresidenta o si por el contrario dispone que se hagan los juicios lo antes posible. En Hotesur y los Sauces, además de Cristina Kirchner, están imputados sus hijos Máximo y Florencia Kirchner.
Nada está dicho pero circula en tribunales la posibilidad de que, en pleno fragor mundialista y con los anhelados goles de Lionel Messi, la vicepresidenta sea sobreseída en el caso del Memorandum con Irán y, en cambio, se revoque su sobreseimiento en Hotesur y Los Sauces. Pero son solo especulaciones.
Cómo sigue la causa Vialidad
Por lo pronto, en el juicio de Vialidad, el tribunal oral federal N°2, integrado por los jueces Jorge Gorini, Rodrigo Giménez Uriburu y Andrés Basso, continuará escuchando esta semana el alegato de los abogados defensores de Lázaro Báez. Ya se expresaron la mayoría de las defensas y restan cuatro de los 13 acusados.
Como las audiencias se realizan tres veces por semana y los imputados tienen hasta tres días cada uno para alegar, el asunto puede extenderse en el mes de octubre y entrado noviembre. Si los jueces aceptan que se realicen réplicas de los alegatos por parte de la fiscalía, el juicio insumiría unas semanas más, ya que la última palabra debe ser de las defensas.
Cuando se le den a los acusados la oportunidad de decir sus últimas palabras y se produzca la lectura del veredicto, la selección argentina ya habría completado la fase de grupos y, como se espera, avanzando a los cruces directos.
La definición de Hotesur y Los Sauces
Los procesos para empezar a definir los casos del Memorandum con Irán y de Hotesur y Los Sauces ya comenzaron. Los camaristas de Casación Diego Barroetaveña, Daniel Petrone y Ana María Figueroa deben escuchar primero los argumentos del fiscal, de los querellantes y los acusados en audiencias orales y luego tienen 20 días hábiles para decidir.
El martes pasado, la Sala I de la Cámara de Casación realizó una reunión ordenatoria para determinar la secuencia en la que va a exponer cada abogado en la causa Hotesur y Los Sacuces, y el tiempo que tendrá cada uno. Son 18 acusados. Cada parte tendrá media hora para exponer sus razones para cerrar el caso, excepto los defensores oficiales, que patrocinan a 12 acusados y que tendrán 10 minutos por cada uno.
En el caso de la vicepresidenta Cristina Kirchner y sus hijos Máximo y Florencia, el abogado que los representa es Alberto Beraldi –el mismo de los casos Vialidad y Memorandum con Irán–, que ya anticipó que no va a hablar sino que presentará sus argumentos por escrito, en un texto que se llama “breves notas”.
El caso Hotesur y Los Sauces está conectado con el de Vialidad. Aquí se investiga a Cristina Kirchner y a sus hijos, junto con los empresarios Lázaro Báez y Cristóbal López, acusados de lavado de dinero, es decir de pagar a la familia Kirchner en concepto de alquileres montos de dinero que habrían oficiado como retornos por haber sido beneficiados con negocios con el Estado. En esta causa todos están sobreseídos sin haber ido a juicio oral.
La querella está a cargo de la Unidad de Información Financiera, que no apeló el sobreseimiento de la vicepresidenta, no concurrió a esta audiencia ordenatoria y no se sabe si va a argumentar.
El fiscal ante la Cámara de Casación en este caso es Diego Villar, que mantendrá el recurso de apelación de su colega del tribunal oral Diego Velasco, que apeló el sobreseimiento de todos los acusados. Villar tendrá una hora para sostener la acusación y convencer a los jueces de llevar a la vicepresidenta y a sus hijos a juicio oral y público por lavado de dinero. Habrá dos audiencias con este propósito, los días 10 y 22 de noviembre.
Cuando finalice la última audiencia, el Código Procesal prevé un plazo de 20 días hábiles para que los jueces resuelvan. Ese plazo se cumpliría cerca del 20 de diciembre, cuando aún resuenen los ecos de la final del Mundial, prevista para el 18 de diciembre en el estadio Lusail, ante 80.000 espectadores.
El Pacto con Irán
El caso del Memorandum con Irán avanza con una agenda paralela al anterior. Ya hubo una audiencia previa para ordenar las exposiciones y la Cámara de Casación Penal comenzó el proceso para definir si reabre el caso. Cristina Kirchner está acusada de firmar un pacto con Irán para encubrir a los iraníes acusados de montar el atentado contra la AMIA, tras la denuncia del fallecido fiscal Alberto Nisman.
Los abogados de los acusados, la fiscalía y los querellantes, que son familiares de las víctimas de las AMIA y la DAIA, realizaron una audiencia con funcionarios de la Sala I de la Cámara de Casación para definir cómo van a ser las exposiciones de los argumentos, los días 8 y 24 de noviembre. Luego de esas exposiciones, los jueces Barroetaveña, Petrone y Figueroa tendrán 20 días hábiles para decidir. El plazo para decidir tras esa audiencia se vence el 22 de diciembre, antes de las fiestas de Navidad.
Beraldi anticipó que tampoco va a hablar en esas audiencias sino que va presentar un documento con sus argumentos. Sí expondrán los letrados de los familiares de victimas de la AMIA, entre ellos Juan José Ávila y su patrocinado, Mario Aberbuj, padre de una de las víctimas, y el abogado de la DAIA, que pugnarán porque se reabra el caso y se realice un juicio oral y público.
En sentido contrario, para defender el sobreseimiento, argumentaran oralmente el abogado Mariano Fragueiro Frías, que defiende a Carlos Zannini; Adrián Albor, por la defensa de Luis D’Elía, que también quiere hacer uso de la palabra. También Martín Arias Dubal, por el actual embajador argentino en Rusia y exviceministro de Relaciones Exteriores Eduardo Zuain, que quiere expresarse en la audiencia.
Además, está previsto que las abogadas Lucila Larrandart y Graciana Peñafort, actual directora de Asuntos Jurídicos del Senado, hablen en nombre de Angelina Abbona; y que Marcelo Aldazabal lo haga por el viceministro de Justicia, Juan Martín Mena.
El fiscal del juico, Marcelo Colombo, apeló la decisión de sobreseer a Cristina Kirchner y al resto de los acusados, un fallo de los jueces José Michilini, Gabriela López Iñiguez y Daniel Obligado, que no encontraron delito en la firma del Memorandum con Irán.
Cuando el caso llegó a la Cámara de Casación, el fiscal Javier de Luca desistió de la apelación, al entender que no pue haber delito en la firma de un tratado internacional ratificado por el Congreso y que se trata de decisiones políticas no judiciables.
Por eso, el único recurso que queda en pie para revisar la sentencia absolutoria es el de las querellas de los familiares de las víctimas del ataque y de la DAIA. De todos modos, el fiscal De Luca hablará en la audiencia de la Casación para explicar su posición.
Una vez que terminen ambas audiencias, a fines de noviembre, los jueces de la Casación Figueroa, Barroetaveña y Petrone deberán resolver. Con la pelota en Qatar rodando, de fondo. Por Hernán Capiello. Fte. Identidad Correntina