SCIOLI SE REUNIÓ CON LA CONFEDERACIÓN ARGENTINA DE TRANSPORTE
Aun con matices, entre las organizaciones que hoy agitan el parche de la unidad, hay unanimidad en la creencia de que sea Scioli, Macri o Massa, el nuevo inquilino de la Rosada, el sinceramiento o un ajuste de la economía sería “inevitable”
Siempre locales, esta vez les tocó ir al pie de Scioli, que los recibió en el por estos días hiperactivo piso 19° del edificio porteño del Banco Provincia. Pero el candidato apenas les dedicó media hora, que luego se encargarían de estirar sus colaboradores, incluido el ya planta permanente del sciolismo, Sergio Uribarri, gobernador de Entre Ríos. Scioli atendía tres reuniones al mismo tiempo, que lo tenían saltando de una oficina a la otra. Ni siquiera llegó a saludar a todos los dirigentes gremiales con los que se sentó.
Como sea, no fue ése el problema mayor para la delegación encabezada por el marítimo Juan Carlos Schmid, el ferroviario Omar Maturano y el colectivero Roberto Fernández, sino “la falta de definiciones” que advirtieron en Scioli sobre los temas que más movilizan a la CATT: inflación, política impositiva, jubilados, inseguridad. “Esperábamos conceptos más fuertes sobre reactivación económica y déficit social”, confesaron a Infobae participantes gremiales del encuentro que duró un café.
Se encontró un punto de aproximación, sí, entre la expresa demanda de la CATT por una Ley Federal de Transporte y la promesa de Scioli de crear, si llega a la Presidencia, un Ministerio de Transporte y Logística.
Los gremios del transporte llegaron a la cita advertidos de que hasta la noche del miércoles el metalúrgico Antonio Caló había desplegado todas sus influencias sobre Scioli para buscar convencerlo de no atender a quienes “le hicieron los dos últimos paros a Cristina”. También habría argumentado el jefe de la CGT kirchnerista y titular formal de la Mesa Scioli Presidente:“No ganás nada Daniel con recibirlos”.
Sobre este punto, Caló, hoy con sus acciones más en baja que nunca, parece llevar la razón. De la veintena de organizaciones que integran actualmente la CATT, ninguna apoya la candidatura presidencial de Scioli, ni se perfila que eso vaya a variar.
Los únicos gremios del transporte que apoyan en firme al postulante del FPV son los tres que justamente no forman parte de la CATT: los obreros marítimos del “Caballo” Omar Suárez (Somu), la Unión Ferroviaria de Sergio Sasia y los taxistas de Jorge Viviani.
Durante la entrevista con Scioli, Schmid se acordó de Caló, cuando se refirió al “chamuyo” del industrialismo. “Sin transporte y logística no se pueden hacer llegar los productos a los puertos”, advirtió el supuesto candidato de Hugo Moyano para liderar una CGT unificada.
El testimonio más enfático fue el de Maturano. Habló el jefe de la Fraternidad de lo “poquito que tuvieron de peronismo” los gobiernos de Néstor y Cristina Kirchner y pidió por último a Scioli, que, si llegara al poder, “no defraude a los trabajadores”. Más tarde amplió con este medio: “Cualquiera sea el signo del próximo gobierno, los gremios del transporte no vamos a permitir ningún ajuste que tengan que pagar los trabajadores”, avisó.
El ferroviario todavía está con la sangre en el ojo de que él y el titular de la UTA hubieran sido excluidos del asado de unidad de la semana pasada, que juntó para la foto a gremios del moyanismo, a los “independientes” Gerardo Martínez (Uocra) y Andrés Rodríguez (Upcn) y a “gordos” como Armando Cavalieri (Comercio), entre otros. También quedaron afuera gremios industriales como la Uom y el Smata, puntales contra la unidad.
“Me dan risa algunas cosas… Yo lo que digo es que sin colectiveros y sin conductores de trenes, que somos gremios estratégicos, no habrá CGT única. Olvidate”, dijo Maturano a Infobae.¿Moyano los dejó afuera?
Quizás se subsane el detalle en una próxima reunión ampliada de los gremios que buscan la unidad. Se la piensa para octubre, antes de las elecciones. En función de ese objetivo, que algunos ven verde todavía, hoy articulan en la mayor discreción un documento conjunto sobre las prioridades que debería atender el gobierno que herede al de Cristina.
Aun con matices, entre las organizaciones que hoy agitan el parche de la unidad, hay unanimidad en la creencia de que sea Scioli, Macri o Massa, el nuevo inquilino de la Rosada, el sinceramiento o un ajuste de la economía sería “inevitable”.
Todos los caminos conducen a una devaluación de la moneda, creen. “Lo reconocen hasta los gremios que apoyaron al kirchnerismo”, sostiene un lugarteniente de Moyano que se manifiesta esperanzado en enfrentar futuras contingencias con la “corporación unida”.Fte.infobae