POLITICA: Moyano trata de reunificar a todos los sectores enfrentados a su conducción

A pesar de su esfuerzo público por ratificar la estabilidad de la alianza con el Gobierno, Hugo Moyano ya no oculta que esa relación no atraviesa por su mejor momento y ha comenzado a observar con alarma y desconfianza los gestos enarbolados por la presidenta Cristina Fernández en la búsqueda de marcar distancia del poder sindical.
Moyano cree estar en la mira de algunos sectores del Gobierno y considera que solo fortaleciendo el poder de la CGT, mediante la reunificación de todos los sectores hoy enfrentados a su conducción, logrará contrarrestar cualquier ofensiva en su contra. Para ello, en las últimas semanas el camionero envío a un grupo de referentes de su máxima confianza a tomar contacto con dirigentes del sector de los llamados ?gordos? y con el gastronómico Luis Barrionuevo, actual líder de la disidente CGT Azul y Blanca, con la oferta de negociar algún entendimiento para asegurar el retorno de esos gremios a la central obrera.
Según confiaron voceros sindicales a El Cronista, las conversaciones fueron comandadas por los dirigentes moyanistas Omar Viviani (taxis), José Luis Lingeri (Obras Sanitarias) y Oscar Mangone (Gas), pero no tuvieron una buena recepción entre los críticos del camionero, donde condicionaron su retorno a la CGT a la elección de una nueva conducción en la entidad.
?Ellos quieren armar una reunión con todos los grupos para discutir como reunificar la CGT, pero no estamos dispuestos a negociar nada bajo los términos que pretende imponer Moyano?, reveló uno de los dirigentes que admitió haber sido sondeado por el grupo moyanista.
Otro referente del sector de los ?gordos? planteó su rechazo absoluto a discutir cualquier acuerdo con Moyano y reprochó que el camionero pretenda el retorno de sus críticos a la CGT al mismo tiempo que apadrina a un candidato propio en las elecciones del gremio de Comercio para poner en jaque la jefatura de Armando Cavalieri. ?El sólo quiere embarrar a todo el mundo con sus líos judiciales?, afirmó el gremialista en referencia a la complicada situación que enfrenta el camionero en el marco de la causa por la denominada mafia de los medicamentos adulterados.
Tanto entre el grupo de los gordos como en el entorno de Barrionuevo sostienen que solo la alternativa de un acuerdo para consensuar una nueva conducción de la central obrera podría facilitar su retorno a la entidad, pero consideran imposible que Moyano esté dispuesto a ceder su liderazgo. ?Nos quiere a todos adentro pero con él conduciendo, porque solo así puede dar batalla a los grupos del Gobierno que lo tienen en la mira?, indicaron en esos sectores.
Sospecha moyanista
Cerca del camionero ya no ocultan la desconfianza que les genera el cambio de posición del Gobierno hacia el sindicalismo tras la muerte de Néstor Kirchner. ?Hay algunos mensajes de independencia que fastidian?, admitió un referente de ese sector.
Esa preocupación se disparó tras la orden de detención que libró el juez Norberto Oyarbide contra el jefe de Uatre, Gerónimo Venegas, en la causa por los remedios truchos. La misma inquietud se acentúo en las últimas semanas, en especial a partir del duro reto que Cristina lanzó en su discurso en el Congreso, donde con inusual dureza reprobó las medidas de fuerza y bloqueos que aplican los gremios. Hubo entonces una reacción unánime de los gremios en defensa de su metodología de protesta y, como advertencia, el aval del propio Moyano a reclamos salariales del 30% en la próxima ronda de paritarias.
Los cortocircuitos continuaron el viernes pasado debido alas circunstancias que rodearon el acto que la Presidenta encabezó en la cancha del club Huracán y al que finalmente Moyano no concurrió pese a estar invitado, por una supuesta recomendación para evitar cualquier enfrentamiento con los sectores de la juventud kirchnerista. Fte.elcronistacomercial, textual