JUSTICIA: EL GOBIERNO DESCARTA NOMBRAR A LIJO POR DECRETO SI LO RECHAZA EL SENADO Y HAY OTROS NOMBRES PARA EL CARGO
En la previa de la discusión en el Senado admiten no contar los votos necesarios para el principal candidato de Milei. Como eventuales reemplazos propondrían a “libertarios de pura cepa”: Ramírez Calvo y Ricardo Manuel Rojas

El Gobierno cambió el discurso sobre las nominaciones de Ariel Lijo y García Mansilla para la Corte Suprema, en medio del escándalo por las criptomonedas y en la previa de la probablemente espinosa sesión del Senado para decidir el futuro de los pliegos. Dos días antes del debate legislativo sobre el primero, descartaron de plano la posibilidad de nombrar a Lijo por decreto, como habían insinuado con firmeza en varias oportunidades. E incluso admitieron que tienen otros nombres de magistrados en carpeta para el caso de que se caiga el pliego.
La discusión en el recinto está prevista para el viernes. Y hoy, en el Gobierno, mientras intentaban sin éxito sacudirse las esquirlas de la polémica por $LIBRA, deslizaron que está prácticamente descartado nombrar a Lijo por decreto, como había planteado el propio Milei. Y que incluso tienen cinco nombres en mente para reemplazarlo, en caso de que sea rechazado.
La votación para definir si se aceptan las figuras para reemplazar las vacantes que dejaron Elena Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda se perfila reñida, según todos los pronósticos. Y en el Gobierno dicen que prefieren evitar un nombrmiento por decreto porque, a partir de entonces, todos los fallos de los magistrados estarían sujetos a revisión. Pero no descartan nombrar por decreto en el caso de García Mansilla.
“Si rechazan a Lijo, vamos a proponer a los jueces más libertarios que podamos encontrar”, dijo un asesor presidencial. Los dos más firmes por los que se inclinan en la Casa Rosada son Ricardo Ramírez Calvo, recomendado por el propio García Mansilla, que trabajó a su lado; y Ricardo Manuel Rojas, el ex juez penal y autor del libro “La Inflación como delito” al que Milei había propuesto ser Procurador del Tesoro tras la escabrosa salida de Rodolfo Barra. Rojas rechazó el cargo -que finalmente aceptó el abogado Santiago Castro Videla-, y no está claro si en el momento en que declinó la propuesta sabía que podrían ofrecerle una designación para el Máximo Tribunal de Justicia.
En la lista de suplentes aparecen también Carlos Laplacette, que también había sonado para encabezar a los abogados del Estado; y Alberto Bianchi, abogado constitucionalista, de perfil académico, autor del libro Recurso Extraordinario, que se utiliza mayormente para apelar a la Corte Suprema.
Noticia en desarrollo…
Fte.i