MIGUEL PICHETTO PRESIDENTE DEL BLOQUE HACEMOS COALICIÓN FEDERAL RECHAQZÓ CON DUREZA LA INCLUSIÓN DE LA REFORMA LABORAL
El presidente del bloque Hacemos Coalición Federal en la Cámara de Diputados calificó como “un ataque sorpresivo” la inclusión de 60 artículos con cambios en la legislación laboral, ya que no era lo que estaban hablando con el Ejecutivo. Apuntó contra el secretario de Trabajo, Julio Cordero
El Gobierno afina los números y ultima las conversaciones con los sectores dialoguistas antes de enviar al Congreso el nuevo proyecto de Ley Bases, que aspira aprobar antes de la convocatoria al Pacto de Mayo del próximo mes. Sin embargo, desde uno de los sectores clave en cuanto a la cantidad de votos para aprobar la iniciativa advirtieron hoy que no aceptarán uno de los capítulos incorporados en los últimos días.
El presidente del bloque Hacemos Coalición Federal, Miguel Ángel Pichetto, rechazó hoy con dureza la inclusión del capítulo de reforma laboral dentro del proyecto al afirmar que son 60 artículos que no tienen que ver con lo que venían negociando con el Poder Ejecutivo. Si bien aceptó que hay algunos puntos que pueden ser aprobados para darle herramientas al Gobierno, advirtió que una reforma integral del sistema laboral debe ser discutido en un debate más profundo con representantes del sector sindical y empresario.
El ex candidato a vicepresidente contó que les enviaron la nueva iniciativa el domingo a la noche y apuntó directamente contra el secretario de Trabajo de la Nación, Julio Cordero.
“Cuando te sorprende un domingo por la noche el señor Cordero, secretario de Trabajo, y vienen con 60 artículos… no, eso no lo voy a votar. Eso nunca estuvo en el diálogo, eso es un ataque sorpresivo por la noche de decir ‘bueno, los muchachos están flexibles, metámosle la reforma laboral’”, afirmó.
Durante una entrevista con el periodista Jorge Fontevecchia en Net TV, Pichetto dijo que hay algunos ítems referidos al mundo laboral que sí pueden ser incluidos en la Ley Bases, entre los que mencionó la eliminación de multas a los empleadores, el aumento del período de pruebas a 8 meses y con cuestiones que tienen que ver con el ingreso al mundo laboral formal. Sin embargo, afirmó que una reforma integral debe discutirse en una ley aparte.
“Ha habido avances, ha habido diálogo. El domingo por la noche aparece u nuevo texto de la Ley Bases donde incorporan una reforma laboral de 60 artículos. Y bueno, son los excesos”, añadió.
En la continuidad de sus críticas, Pichetto puso el foco en el secretario de Trabajo: “El señor Cordero, que responde también a una gran corporación argentina beneficiada por este Gobierno, cree que somos amateurs. Y no somos amateurs, somos gente responsables que trata de colaborar. Y tampoco fuimos los que impedimos al Gobierno que esta ley saliera. La Ley fue retirada de manera abrupta por el propio Gobierno”.
En el mismo análisis crítico, el rionegrino cuestionó que el Gobiero haya intentado delegar en la UCR la elaboración de una reforma laboral ya que, afirmó, “tuvo algunas experiencias fallidas en ese tema. Nadie sabe la historia en este país? Me refiero a la Ley Mucci. Fue la primera ley que Alfonsín quiso tratar. Y después la ley Banelco también”.
Julio Cordero, secretario de Trabajo de la Nación. Foto: Nicolás Stulberg
El Gobierno decidió incluir una propuesta de “modernización laboral” dentro del proyecto de Ley Bases que debatirá el Congreso que es prácticamente igual al DNU 70 que fue frenado por la Justicia. Así surge del último borrador enviado este lunes por el Poder Ejecutivo a la Cámara de Diputados.
De esta forma, la Casa Rosada desistió de tomar el proyecto de reforma laboral de los diputados de la UCR como base para buscar su sanción legislativa y, si no hay cambios sustanciales durante el tratamiento en comisión, el nuevo texto no mejorará la relación con la CGT: allí figuran la restrictiva reglamentación del derecho de huelga en diversas actividades que son consideradas servicios esenciales; la penalización de las asambleas de trabajadores que terminan convirtiéndose en medidas de fuerza encubiertas; pone en jaque la ultraactividad de los convenios colectivos, principio que obliga a mantener su vigencia hasta no negociar uno nuevo, y considera como “injuria laboral grave la participación en bloqueos o tomas de establecimiento”, entre otros puntos.
Días atrás, diputados y senadores de la UCR llevaron a la Casa Rosada un borrador de la reforma laboral para reemplazar el capítulo del DNU que quedó frenado por la Justicia, en una movida que parecía consensuada con el Poder Ejecutivo.
Tras insistir en varias oportunidades que tiene la vocación de apoyar la nueva Ley Bases, Pichetto también cuestionó la magnitud del proyecto que envió el Ejecutivo: “Ya tiene 300 artículo de nuevo, les encantan los mamotretos legales. Con el capítulo fiscal estamos cerca de 400. Y es un error, porque habría que haber dividido por materia. Pero bueno, vamos a tratar de que esto salga. Avanzamos mucho y estamos muy cerca”, aseveró.
Las negociaciones sobre el texto final de la Ley Bases, el paquete fiscal y la reforma laboral continúan a contrarreloj en la Cámara de Diputados. El plenario de comisiones previsto para este miércoles se pospuso -por lo menos- hasta el jueves porque el Gobierno quiere tener asegurados los votos antes de continuar. En un marco de diálogo fluido, durante los últimos días el Gobierno rechazó algunas de las propuestas de la oposición dialoguista pero aceptó hacer modificaciones clave que allanaron el camino.