EN LA CRÍSIS DEL PRO NO SE DESCARTA UNA REUNIÓN DE MACRI CON RODRÍGUEZ LARRETA
El ex presidente viajó al exterior y prevé contactos para superar la pelea opositora
Mauricio Macri viajó anoche a República Dominicana para dar una charla junto con otros ex presidentes latinoamericanos, pero su agenda internacional no le impide seguir monitoreando la crisis en el PRO. El ex mandatario fue el primero que se enteró de la propuesta de María Eugenia Vidal para que los candidatos del partido bajen sus candidaturas y “vuelvan a empezar” la discusión electoral. ¿Qué piensa sobre esa idea? “Que es algo de María Eugenia y sus buenas intenciones”, dijeron en su entorno. Cuando este jueves regrese al país comenzará una serie de contactos para ayudar a destrabar el conflicto del PRO: se verá con Federico Angelini, quien asumirá esta semana como jefe del partido en reemplazo de Patricia Bullrich, y buscará reunirse con Horacio Rodríguez Larreta.
Aunque se mostró furioso con el alcalde porteño por su anuncio electoral, Macri sabe que tarde o temprano deberá acercarse a Larreta para definir, entre otros temas, un solo candidato del PRO a jefe de Gobierno: “Ya me sentaré a conversar con Horacio”, admitió en su círculo íntimo.
Para el larretismo, Macri estuvo detrás de la iniciativa de Vidal, que fue rechazada por el jefe de Gobierno y por la ex ministra de Seguridad. Ambos dirigentes consideran que no puede haber marcha atrás con sus postulaciones. Los bullrichistas creen que el ex mandatario ya hizo un gesto con su renunciamiento electoral y que su jefa política también lo produjo al pedir licencia por 90 días como titular del PRO. “Ahora los gestos los tienen que hacer los otros”, dijeron en alusión a Larreta.
La pelea que se desató en el PRO por el anuncio de Rodríguez Larreta de que los porteños votarán con el sistema de elecciones concurrentes, con doble urna, dejó más en evidencia las diferencias irreconciliables que mantienen sus principales líderes. Macri quedó desilusionado por la decisión inconsulta y solitaria que tomó el jefe de Gobierno. La mayoría de la dirigencia del partido también rechazó la resolución de Larreta al considerar que “manipuló” las reglas electorales, mientras que el alcalde porteño replicó que se había limitado a cumplir la ley: “En la ciudad, el Código Electoral es claro: fue modificado en 2018 y está vigente desde 2020, y dice que se vota con boleta única”.
En el fondo, las diferencias esconden el enfrentamiento entre Macri y Rodríguez Larreta por el liderazgo opositor y, además, en un punto clave: el anuncio electoral porteño empareja las chances electorales del candidato a sucederlo en el PRO (el ex presidente impulsa a su primo, Jorge Macri) y del radical Martín Lousteau, lo que dio pie en las filas macristas y bullrichistas a dar por probado un presunto pacto entre el jefe de Gobierno y el senador de la UCR para apoyar sus planes políticos.
En medio de un clima de tensión, Bullrich decidió alejarse durante 90 días de la presidencia del PRO para dedicarse de lleno a la campaña. En su lugar quedará el actual vicepresidente del partido, Federico Angelini, un hombre de Macri que se convirtió en un operador clave del bullrichismo. Con el pedido de licencia, Bullrich apuntó a incomodar a Larreta. Al fundamentar su resolución, dijo: “Debemos hacer todos los esfuerzos para separar nítidamente cada institución, dando pasos en un sentido correcto que afiance la República, sin aprovecharnos de los cargos públicos o partidarios”. Es decir, el jefe de Gobierno debería pedir una licencia para no sacar provecho del aparato porteño.
Pese a su condición de macrista-bullrichista, Angelini asumirá esta semana la presidencia del PRO con una serie de decisiones para intentar que toda la dirigencia baje los decibeles de la pelea interna: les pedirá acordar una tregua para que los enfrentamientos no afecten electoralmente al partido. Para eso quiere reunirse con Macri, Larreta, Bullrich y Vidal en las próximas semanas, además de meterse en el armado de algunos distritos del interior en donde hay divisiones en Juntos por el Cambio.
Angelini acompañó este lunes a Bullrich a San Carlos de Bariloche, donde la candidata presidencial habló ante los empresarios del círculo rojo en el Foro Llao Llao. Pocas horas antes se había mostrado muy duro contra Elisa Carrió, quien dijo que Macri quiere romper JxC para acercarse a Javier Milei: “No hay nada más funcional al kirchnerismo que criticar a Juntos por el Cambio como lo hace Carrió”.
Bullrich no se cruzará en el Foro Llao Llao con Rodríguez Larreta, quien viajará esta mañana a Tierra del Fuego y llegará a las 18 a Bariloche para presentar por la noche sus ideas económicas ante el empresariado. Milei tampoco coincidirá con sus rivales del PRO: el libertario hablará este mediodía.
Mientras Vidal hacía su propuesta de que se bajen todas las candidaturas del PRO, Macri participaba de manera virtual de la segunda reunión del Grupo Libertad y Democracia junto a presidentes latinoamericanos como Sebastián Piñera (Chile), Iván Duque (Colombia), Andrés Pastrana (Colombia), Jorge Quiroga (Bolivia) y Felipe Calderón (México). Poco después partió a República Dominicana.
La ex gobernadora le anticipó por teléfono su idea. Macri valoró la iniciativa, aunque luego, antes sus allegados más estrechos, tomó distancia: “Es algo de María Eugenia y sus buenas intenciones”, les comentó. Vidal tiene previsto anunciar a fines de mes si será o no candidata presidencial. Para sus rivales internos, su jugada tiene un componente de “conveniencia personal” y es “impracticable”. Es más: algunos la ven como el preámbulo de una posible postulación a jefe de Gobierno porteño, que permitiría superar la grieta entre Jorge Macri y los candidatos larretistas Fernán Quirós y Soledad Acuña. En el vidalismo lo descartan de plano: “No le interesa. Sería una contradicción con lo que viene diciendo María Eugenia contra la discusión alejada de la gente por los cargos y las candidaturas”.
Rodríguez Larreta confía en las encuestas propias que afirman que podría ganar las PASO gracias al voto moderado e independiente, resignado a su pérdida de espacio en el electorado duro del PRO en favor de Bullrich. Apuesta a hacer valer su condición de líder del espacio en la ciudad con la ratificación hasta último momento de las candidaturas de Quirós y Acuña. Sus estrategas creen que así podrá obligar a negociar a Macri y Bullrich desde una posición de fuerza porque si se presenta más de un candidato del PRO en las primarias aumentan las posibilidades de una victoria de Lousteau.
La disputa en el PRO ya contamina cada tema político y cada elección. En las últimas horas, por ejemplo, los máximos líderes del partido procuraron sacar rédito político del triunfo de Rolando Figueroa en las elecciones a gobernador de Neuquén, que puso fin a 60 años de predominio del Movimiento Popular Neuquino (MPN). Su candidatura fue respaldada firmemente por Rodríguez Larreta y también por Macri, pero Bullrich no pareció tan entusiasta. Juntos por el Cambio se rompió en esa provincia: mientras el PRO apoyó a Figueroa, la UCR y la Coalición Cívica impulsaron la postulación de Pablo Cervi, quien quedó quinto en los comicios, con el 3,86% de los votos.
Los esfuerzos de cada referente del PRO por aprovechar la victoria de Figueroa mostraron una fisura en el caso de Bullrich: la diputada provincial Leticia Esteves, que figuraba primera en la lista del gobernador electo, salió al cruce de la felicitación de la jefa partidaria. “Patricia, no apoyaste al PRO y tus referentes fueron funcionales a los que gobiernan Neuquén hace 60 años. Los hechos dicen más que las palabras”, publicó en Twitter. Y, para que no queden dudas de su alineamiento, agregó: “Gracias Horacio (Rodríguez Larreta)! Sin tu acompañamiento esto no hubiera sido posible”.
Otro punto de discordia que quedó al desnudo fue la reacción de Carrió ante el “coqueteo” de Macri y Bullrich con Milei y las expresiones en favor de un acuerdo electoral entre JxC y el líder libertario. “El problema de la oposición es que Mauricio no quiere estar en JxC. Él no quiere estar con el radicalismo ni con la Coalición Cívica; lo dijo, quiere estar con Milei”, señaló la ex diputada.
A Carrió le contestaron “halcones” del PRO como Angelini y el diputado nacional Fernando Iglesias, quien le dedicó un tuit duro y sintético en las redes sociales: “Qué tristeza verte en ese papel”.
Las especulaciones sobre un acuerdo con Milei crecieron luego de que el propio diputado de La Libertad Avanza declaró: “Estamos a tiempo de crear un partido e ir a una interna con Patricia Bullrich; el que gana conduce y el que pierde acompaña. Sería darle una solución más pura”.
Al hablar en un almuerzo organizado por el Consejo Interamericano de Comercio y Producción (Cicyp), en La Rural, Macri pareció haberle hecho un guiño a Milei la semana pasada al vaticinar que el líder libertario entraría en un ballotage junto con Juntos por el Cambio. “Es obvio que pienso que vamos a ir a la segunda vuelta contra esta nueva expresión más liberal, más rupturista, de más enojo con la frustración que se arrastra durante décadas”, sostuvo el ex presidente.
A la polémica se sumó el titular de la UCR, Gerardo Morales, quien insistió en que si Macri y Bullrich promueven una alianza con Milei, su partido no formará parte de ese acuerdo. “Nosotros no tenemos nada que ver con eso”, dijo, luego de lo cual puntualizó: “Para mí, (Milei) está mal de la cabeza, es un desquiciado. Ni me interesa cuál es la opinión de esa persona. Si nos proponen la venta de órganos, la libre circulación de armas, la eliminación del Banco Central y la eliminación de la educación pública, no cuenten con nosotros”, advirtió el candidato presidencial del radicalismo. fTE. i