LA NEGOCIACIÒN CON EL FMI ¿ACELERA O FRENA? YA QUE NO HAY DEMASIADOS AVANCES CONCRETOS
El Gobierno sabe que tiene que mostrarse más proactivo porque la calma financiera con el dólar está supeditada a un programa con el Fondo
Las negociaciones entre el Gobierno y el Fondo Monetario Internacional (FMI) siguen sin mostrar demasiados avances concretos a pesar de las frases de buena voluntad de un lado y del otro. Eso hizo que crecieran los rumores acerca de que el oficialismo no vería del todo mal un aplazamiento en el tan mentado acuerdo aprovechando el viento de cola del exterior y la paz cambiaria lograda. ¿Surgirá un entendimiento en abril o se jugará el Presidente a patear todo para después de las elecciones de octubre y así no aceptar condicionantes?
Según supo pudo conocer, en el equipo económico descartaron que esté en sus intenciones «congelar el acuerdo con el Fondo». «Todo lo contrario, la idea es cerrarlo antes de mayo cuando haya vencimientos importantes con el Club de París», dicen en el elenco oficial a banqueros ansiosos por novedades. «Siempre dijimos que esto iba a tardar tiempo porque necesitamos un buen acuerdo hecho por la Argentina. Pero no hay una estrategia de demorar un programa, saldrá cuando esté finalizado», repiten en el equipo económico.
De hecho, el Gobierno sabe que tiene que mostrarse más proactivo porque la calma financiera con el dólar está supeditada a un programa con el Fondo. El mercado tiene incorporado eso y de extenderse el desenlace, podría haber consecuencias. Los financistas creen que si la Argentina patea el acuerdo para luego de las elecciones, podría poner el riesgo la tranquilidad que hay con el dólar.
Después de la conversación de Alberto con la directora gerente del FMI apareció Martín Guzmán (en gira política en el interior y algunas provincias) avisando que «hay que ir poniendo las cuentas fiscales en orden» y confirmando que no habrá IFE ni ATP este año. Claro, eso no significa que el empoderado ministro de Economía (se dice incluso que lo están «midiendo» para ver la llegada como candidato) vaya a reducir más rápido el déficit fiscal (4,5% estipulado para este año).
La Argentina busca acordar con el FMI un programa de facilidades extendidas (EFF, por sus siglas en inglés) de hasta 10 años con cuatro de gracia que le permita refinanciar u$s44.000 millones que le otorgó el organismo en 2018 (el préstamo total fue por u$s57.000 millones pero cuando asumió Fernández se frenaron los desembolsos).
En las últimas horas quien cerró un entendimiento así fue Costa Rica: acordó con el FMI un EFF en donde se habló de reformas para asegurar la sustentabilidad de la deuda, estabilidad monetaria y financiera, autonomía del Banco Central y mejora de la productividad laboral. Se pactó un superávit primario de 1% del PBI en 2023.¿le pediràn algo parecido a Guzmàn?.
Y recuerda que la Argentina tiene us$s1.300 millones de Derechos Especiales de Giro (DEG) en el BCRA, la moneda del FMI, en las reservas netas. «Podría seguir pagando con DEG, pero se quedaría sin fondos para pagar los u$s1.800 millones de septiembre, por la primera cuota del préstamo al FMI», explica. Un camino es que el Tesoro compre dólares al BCRA y pague al FMIcomo hizo Nestor Kirchner en 2006.
Además, también hay que pagarle al Club de París. En mayo, caen vencimientos con ese multilateral por u$s2.300 millones. «Para refinanciarlo, primero es necesario tener un acuerdo avanzado o Carta de Intención con el FMI», avisa el consultor. Fte. textual IProfesional