sábado 23 de noviembre de 2024 09:39:03

ECONOMÌA: LAFLEXIBILIZACIÒN NO TERMINA DE RESOLVER UNA CRÌSIS QUE ES PREVIA AL CORONAVIRUS

Los distritos que tienen que afrontar compromisos de pago este año son, además de Buenos Aires, Mendoza y Neuquén, la Ciudad de Buenos Aires y Tierra del Fuego, por un total de u$s1200 millones

La apertura controlada de los distintos sectores productivos del interior del país se enfrenta por estas horas al dilema de que, pese a la esperanza de los gobernadores en que las finanzas locales comiencen a recuperarse lentamente recién a partir de junio, el contexto general del país y del mundo podría neutralizar o retrasar la aparición de cualquier síntoma de mejoría en una economía con las defensas bajas mucho antes de la llegada del coronavirus Covid-19.

En cuanto a los ingresos propios, la situación de las provincias habrá expuesto en abril quizás el peor resultado de los últimos tiempos: ingresos brutos, el principal impuesto subnacional, acumula una caída del 23%, empujada por la parálisis general de la actividad.Buenos Aires reconocerá un desplome superior al 42% en su recaudación, lo que implica un dramático retroceso en el proceso de mejoría que pareció vislumbrar el distrito gobernado por Axel Kicillof hacia principios de año.

No es el único caso: Río Negro espera una caída real del 53,8% y Neuquén, del 58%.

Son todos porcentajes en los que incide también, en rigor, la postergación en el pago de tributos locales dispuesta por los mandatarios para aliviar el bolsillo de los contribuyentes, así como los diferimientos y exenciones impositivas otorgadas para aliviar a los privados.

Y allí es donde surgen otros interrogantes. ¿Podrán los gobernadores salir a buscar financiamiento cuando haya pasado el trauma de la cuarentena? Y en ese caso ¿quién le prestaría a un Estado cuya recaudación propia y coparticipación se desploman sin límite a la vista en un país, además, en la cornisa del default?

Los distritos que tienen que afrontar compromisos de pago este año son, además de Buenos Aires, Mendoza y Neuquén, la Ciudad de Buenos Aires y Tierra del Fuego, por un total de u$s1200 millones, de los cuales u$s816 millones corresponden a vencimientos bonaerenses.

El próximo año, en tanto, será el turno de Santa Fe, Córdoba, Chaco, Chubut, Entre Ríos, La Rioja, Río Negro y Salta, por unos u$s 2200 millones. Con todo, el rojo fiscal se agranda y obliga a varios gobernadores a atar gran parte de las finanzas locales a la ayuda de la Casa Rosada -por ahora traducida en un desembolso global de $120 mil millones (60 mil millones en ATN y otros 60 mil en formato de préstamo)-, para contrarrestar la caída de la coparticipación, que en abril se ubicó en el 18,9%. Un importante funcionario nacional, con despacho cercano al área que articula la relación con las provincias, explicaba que aquellos distritos con superávit crónico, como Formosa o Santiago del Estero, podrán hacerle frente con menos sufrimiento a la caída de recursos nacionales. Otras, en cambio, donde los ingresos nacionales representan cerca del 80% de la caja, están frente a un escenario de mayor incertidumbre y de mayor dependencia de una mejora general.

“Es un año muy complejo para la inversión pública pero no por eso vamos a dejar de trabajar en el proceso de calidad de la inversión pública. Eso se logra con orden fiscal, que lo veníamos logrando. Lo importante es no dejar de hacerlo”, aseguró el ministro de Hacienda de Mendoza, Lisandro Nieri.

El funcionario del gobierno del radical Rodolfo Suarez reconoció que deberán ser “más eficientes que nunca en la administración de recursos y en la alta dependencia que tenemos del Gobierno Nacional, que ha largado una asistencia a través de ATN del orden de los 5.000 millones de pesos de los cuales recibimos una parte y habría otra en camino”.

“Mayo va a ser mucho más complejo, no podemos dar certeza incluso del pago de los salarios”, advirtió en línea con la matriz generalizada a esta altura en todas las provincias, incluso en aquellas con las finanzas más oxigenadas.

Hay, por último, un lote de distritos con economías más “independientes”, como las petroleras, con un porcentaje de recursos propios mayor al de origen nacional por efecto del cobro de regalías (hoy en retroceso); o la misma Ciudad de Buenos Aires, cuya economía de servicios representa el 70% de los fondos de caja mensuales.

“Cuando esto pase, el gobierno de (Horacio Rodríguez) Larreta se recuperará más rápido que muchos otros distritos”, presagió un funcionario de la Jefatura de Gabinete nacional.

Y agregó: “Para entonces, tanto la Nación, como las provincias y los municipios deberíamos avanzar obligatoriamente en acuerdos sociales integrales. El escenario se torna incierto, ya que tampoco podemos saber cuánto durará esta etapa a nivel mundial”.Fte. Ambito