POLITICA: EL CIRCULO SE VA CERRANDO POR EL CONSULTOR POLÍTICO CARLOS FARA
Cierta estabilidad económica de las últimas semanas, más un rebote en la actividad de abril contra marzo, genera una tibia recuperación de la aprobación presidencial
De a ratos parecía que el terremoto iba a ser más grande. Sin embargo, el agua no se está yendo tanto de cauce. ¿Los diques de contención quizá funcionan mejor de lo esperado? Aunque faltan 14 días para la inscripción de frentes y 24 para las candidaturas, después del derramamiento inicial de magma, el volcán se llamó a sosiego.
La convención radical jugó dentro de lo esperado: hace varias semanas que se sabía que difícilmente hubiera sorpresas. Más allá de los pataleos –algunos de ficción- la UCR comparte con el PRO el mismo segmento social, ergo no tiene a donde ir. Lavagna obviamente no era una opción dada la mala experiencia de 2007. Y decretar la libertad de acción era pegarle un tiro de gracia al gobierno de Macri. La historia no se los perdonaría.
Lavagna rompió lanzas: aunque siempre en estas cosas se corre el arco para que la pelota no entre, había situaciones esperables. Como que los eventuales socios se abrazaran al sistema PASO como un mantra. Sobre todo si el ex ministro no levantaba tanto vuelo como necesitaba para ganar la batalla sin darla (según el ideal de Sun Tzú). El vodevil alimentado por ambas partes no le dejó mucho margen para maniobrar a su favor. Veremos si las urnas le dan la razón.
El kirchnerismo saluda para gobernador la fórmula Kicillof – Magario: señal negativa para un Massa a quien nunca le gustó ese rol por la maldición bonaerense. Al bajar el precio que los Fernández quieren pagar por el tigrense, se diluye la gran confluencia peronista. Por esta vía no se debe descartar que Cristina se corra de la fórmula presidencial, pero con el beneplácito de los gobernadores ya tiene menos incentivo (Massa quería ocupar el lugar de Cristina en la fórmula). Por otro lado, las primeras mediciones una vez que bajó la espuma indican que Alberto + Ella suman prácticamente lo mismo que con CFK encabezando.
lternativa Federal (AF) se afirma en sí misma: en parte por convicción, en parte por incentivo externo (el gobierno), en parte por cálculo político, el cuarteto (con 2 gobernadores adentro) juega a ser la tercera vía más votada (si además se bajase Lavagna). A la hora que se escriben estas líneas, lo más probable es que Massa se quede con los federales por: a) alta probabilidad de volver a ser candidato a presidente, con lo cual pasa a la final; b) la desaparición de la amenaza de Lavagna; c) el bajo precio que los K querían pagarle; y d) dado que hoy su rol es estratégico, su no participación en UC-PJ, si gana Macri, le volverá a dar la chapa de “yo sigo impidiendo que Cristina vuelva” al ayudar a fragmentar el voto anti Cambiemos.
Por qué está terminando el agua en el cauce?
Cierta estabilidad económica de las últimas semanas, más un rebote en la actividad de abril contra marzo, genera una tibia recuperación de la aprobación presidencial + un incremento en la intención de voto de Macri. Esto hace pensar a los actores que ya no es tan inevitable la derrota oficialista.
Dada la dinámica inestable de todas las variables de contexto, que hace difícil de predecir el comportamiento electoral final, deriva en que los jugadores decidan ser conservadores con sus apuestas.
En la política las lógicas disruptivas predominan pocas veces. Al final, es un juego que tiende a desarrollarse de manera muy incremental, con muchos apostadores de poca monta, y unos pocos dispuestos a romper la banca. Last but not least, la psicología de los personajes influye más de lo esperado. Lavagna nunca quiso someterse al fragor de la lucha política y por eso tiene una vara alta difícil de satisfacer. Los gobernadores son unos sobrevivientes eternos del cotidiano. Massa se proyectó nacionalmente enfrentando a Cristina y en su fuero íntimo sabe que al lado de ella nunca tendrá el control. CFK sabe cómo lograr que el mundo gire a su alrededor. Scioli nunca lideró un proyecto propio. Etc. etc.
Epílogo: lo que hace 10 días parecía desatar un movimiento centrípeto, mantendría su centrífugo continuo. La inercia previa condiciona los intentos de ruptura.
