sábado 23 de noviembre de 2024 14:24:20

ECUADOR: EL OFICIALISTA LENIN MORENO SE IMPONE EN SEGUNDA VUELTA

La oficialista Alianza País se impuso en esta segunda vuelta por 51,11% contra el 48,89% del ex banquero Guillermo Lasso

Ganó la continuidad. El ex vicepresidente Lenin Moreno será el próximo mandatario de Ecuador, según los datos oficiales difundidos anoche. Después de horas de incertidumbre, con encuestas en boca de urna que daban resultados opuestos, se confirmó con datos oficiales al 95% que el candidato de la oficialista Alianza País se impuso en esta segunda vuelta por 51,11% contra el 48,89% del ex banquero Guillermo Lasso, quien sin embargo no reconoció la derrota y lanzó sospechas de fraude.

Desde el 24 de mayo, Moreno deberá hacerse cargo, por los próximos cuatro años, de un país profundamente dividido y sumido en una profunda crisis económica.

Cerca de las 9 de la noche (dos horas más en Argentina) el Consejo Nacional Electoral dio los resultados, después de tres horas de zozobra. A las 17, una encuesta en boca de urna daba ganador a Lasso por 53,02% contra 46,98% de Moreno. Pero otro sondeo, de Perfiles de Opinión, le otorgaba el triunfo a Moreno por 52,2% contra 47,8%.

Ambos candidatos habían salido a celebrar y hablaron al país ya como ganadores. Lasso apareció en varios canales de TV, diciendo que había ganado “la democracia, la libertad”. Moreno, en tanto, llamó a esperar los resultados.

El escenario de incertidumbre que temían muchos analistas se cumplió. Muchos se fueron a dormir sin saber finalmente si se confirmará este resultado.

Por su parte, la ONG privada Participación Ciudadana dio a conocer la investigación de un conteo rápido, del que no dio resultados, pero su presidenta Ruth Hidalgo dijo que había “un empate técnico” con una diferencia de 0,6 por ciento. Y otro conteo rápido –que se hace sobre actas oficiales– encargado por el Consejo Nacional Electoral aseguraba que Morenó se imponía por unos dos puntos.

A última hora, tras el resultado oficial, el líder opositor salió a anunciar que no iba a aceptar el resultado y lanzó acusaciones de manipulaciones durante el escrutinio. Apuntó directamente contra el presidente saliente: “Señor Rafael Correa, no juegue con la gente”, advirtió. Y dijo que presentarán una serie de impugnaciones por la manipulación de actas. Pero en el norte de la ciudad, los partidarios de Alianza País celebraban con música, bailes y banderas.

Poco antes de que se difundieran los datos oficiales, Moreno, quien fue vicepresidente de Rafael Correa en su primer mandato, salió del Hotel Quito, donde había esperado los resultados con su equipo y fue hasta la Tribuna de los Shyris, en el norte de la capital, donde desde temprano se habían concentrado sus seguidores. Allí, sobre un escenario rodeado del color verde que caracterizó su campaña, confirmó que, según datos “certeros” que manejaba su campaña, era el ganador.

“Voy a ser el presidente de todos los ecuatorianos”, lanzó Moreno, de 64 años, quien a lo largo de la campaña intentó diferenciarse deCorrea y mostrarse como un hombre “de consenso”, abierto a dialogar y a buscar con todos los sectores de la sociedad la forma de sacar al país de una fuerte crisis económica.

“Hemos avanzado muchísimo en el gobierno del presidente Correa. Nos falta aumentar calidad, vamos a llevar adelante el programa Toda una vida, que enamoró a todos los ecuatorianos, porque establece un compromiso de gobierno responsable, con todos los ciudadanos, en todos los momentos de la vida”, prometió Moreno.

“Hay que defender la revolución. Estamos saliendo de uno de los momentos más difíciles en la economía del país”, aseguró, frente a una multitud de seguidores que le cantaban “Lenin, amigo, el pueblo está contigo”. Moreno también prometió terminar con la corrupción. “Quiero que cuando termine mi mandato podamos decir que se erradicó la falta de vivienda, la pobreza extrema, se erradicó la corrupción”.

En la Tribuna de los Shyris había fiesta, con música y bailes. Cuando terminen los festejos, el próximo presidente se encontrará con la realidad de denuncias de fraude y medio país en contra.

Luego de unos días de gran crispación, en una sociedad profundamente dividida, la jornada electoral había sido tranquila en gran parte del país. Fue luego de un fuerte llamado a la calma por parte de los dos candidatos, del gobierno y de los observadores internacionales que llegaron al país para esta elección.

En Quito, bajo un sol que volvió a golpear al mediodía luego de varios días de lluvia, se veían familias en los colegios y universidades convertidos en centros electorales, que entraban y salían sin demoras y aprovechaban para comprase algún helado o sándwich al paso, en los puestos de comida y bebida que se instalaron junto a los lugares de votación. Correa había inaugurado la jornada electoral antes de las 7 de la mañana, con un discurso en la sede del Consejo Nacional Electoral. Allí, llamó a los políticos a “ser humildes en la victoria y dignos en la derrota”.Fte. textualClarín