Jorge Vitale: Nos vamos a encontrar con otro Lázaro Báez

Jorge Victorero entrevistó a Jorge Vitale acerca de la causa que presentó y fue reabierta en 2016 acerca del patrimonio y posibles redes en el entorno del ex gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Osvaldo Scioli. La figura de Elisa Carrió y la implicancia de la denuncia.

«Hace un mes yo me dirigía a Elisa Carrió pidiéndole por favor que se interesara por esta causa, porque tenía consecuencias bastante importantes; no era sólo el enriquecimiento de Daniel Scioli durante todo el tiempo que fue funcionario, sino también todas las conexiones de juego y de droga en la cual estaría involucrado, y que habían sido fruto de la cantidad de bienes que hoy tiene Scioli. Además me aventuré a decirle que todavía no se había destapado todo; que nos vamos a encontrar con otro Lázaro Báez, porque los bienes que tiene Scioli son de tal envergadura que se hace importante analizarlo. Ella (Elisa Carrió) tiene el prestigio necesario, el respaldo también por ser diputada, y que a mi me sobrepasaba. Había tratado por todos los medios reabrir la causa, se había presentado un abogado que representa al partido de Rodríguez Saá, también solicitando la reapertura, y se logró, porque la Cámara lo había denegado pero luego Casación reabrió esta causa».

«Yo hacía referencia a las distintas sociedades que él tiene. El hace referencia a una empresa, que es la dueña de la famosa Ñata, no hace referencia de otras tres empresas. Él omite tres empresas que son muy importantes, que Elisa Carrió denuncia.»

«La DDJJ qué el presentó en su momento, el no puede justificar lo que presentó. La DDJJ de Scioli, solamente lo que él presenta más lo que él gano, y no puede justificar ni lo que él mismo presentó.»

«Es muy importante lo que hizo Elisa Carrió, con el prestigio que ella tiene y con los elementos que le hemos aportado, de estancias que han aparecido, testigos que han querido declarar, que el juez en su momento no lo requirió, realmente fue un bochorno ese sobreseimiento; se lo hace declarar en silencio, se le va a tomar la declaración al despacho de la gobernación, y después de un trámite express de diez días se dicta… peor que Oyharbide.»

Edición y gráfica: Infante Antonio para Multimedios Prisma