sábado 23 de noviembre de 2024 06:10:56

Boudou se defiende desde la pantalla de TN

«No conozco a Vandenbroele y reitero que jamás lo vi», afirmó una vez más Boudou

lotosEl vicepresidente Amado Boudou señaló anoche que «a pesar de los esfuerzos desmesurados» deljuez Ariel Lijo por demostrar su presunto vínculo con Alejandro Vandenbroele «esas pruebas e indicios nunca aparecieron, ni existen», y se despegó de su amigo José María Núñez Carmona, el nexo con The Old Fund, por todas las «coincidencias» que aparecen en la causa.

«No conozco a Vandenbroele y reitero que jamás lo vi«, afirmó una vez más Boudou al hablar en una entrevista concedida por primera vez a un programa no oficialista y del Grupo Clarín, con quien el Gobierno mantiene un feroz enfrentamiento. En declaraciones al ciclo «Palabras más, palabras menos», conducido por Ernesto Tenembaum y Marcelo Zlotogwiazda, en la señal de noticias TN, añadió que Vandenbroele tampoco fue su inquilino sino que le hacía trámites a Fabián Carosso Donatiello, con quien firmó el contrato de alquiler.
«Se hablaba de un supuesto video mío con Vandenbroele, pero nunca apareció. La verdad que no existe», aseguró al referirse a su situación en el marco de la investigación por presunto abuso de la función pública en la causa de la ex imprenta Ciccone.
También negó haber mantenido reuniones con los Ciccone pero sin embargo admitió haber compartido una cena con su amigo Núñez Carmona y el empresario del área de la salud Claudio Belocopitt, encuentro del que también fue parte el yerno de Nicolás Ciccone, Guillermo Reinwick.
Según dijo, en esa comida en el Palacio Duhau, Reinwick «no habló» y sólo era «un tal Willy».«Una vez que yo fui al hotel (no precisó la fecha) a comer a la noche, estaba el empresario Belocopitt con Núñez Carmona y una persona que denominaban Willy. Ahora sé que es Reinwick», describió Boudou al tiempo que aseguró que jamás se nombró el tema Ciccone en esa ocasión.
Un día antes, en la indagatoria ante Lijo, Boudou había omitido el dato de su cena con el dueño de Ciccone.
El presidente del Senado sostuvo que los propietarios de The Old Fund -la sociedad que levantó la quiebra de la ex Ciccone Calcográfica- son el financista Raúl Moneta y precisamente Reinwick.
Reinwick, por su parte, afirmó la semana pasada en el programa «Periodismo para Todos« que el Gobierno a través de Boudou se quedó con la ex imprenta, cuya venta puso bajo la lupa de la Justicia al vicepresidente. Además, precisó que él nunca trabajó en Ciccone y explicó que lo que hizo fue vincular a Boudou con su suegro a través de un vecino -Gabriel Bianco- que era«amigo de toda la vida» del actual vicepresidente. «¿Cuál es el delito? Lo hice y lo volvería a hacer porque es mi suegro y estaba en quiebra», se defendió.
quetal
Indicó, a su vez, que tiempo después de hacer el contacto se reunió «en Telefé« con «Nicolás Ciccone, Gabriel Bianco, Boudou y Núñez Carmona«, aunque el vicepresidente no habría estado presente en el diálogo ya que tenía en esos instantes una entrevista en el ciclo AM.

Boudou reiteró a lo largo de la entrevista en el Senado, que se extendió por más de una hora, sus argumentos en su defensa sobre la causa Ciccone, en la que está sospechado de haber intentado quedarse con la calcográfica a través de testaferros, y consideró que no puede estar «respaldado por el Gobierno» cuando «formo parte» de él.
«Yo soy parte del Gobierno, no puedo estar respaldado por el Gobierno. Ahora, si me decís en términos de lo que me está pasando, sería muy ingrato si quisiera involucrar al funcionamiento diario del Gobierno en esta causa. Me tengo que defender solo«, dijo. Y agregó: «tengo que decir mi verdad y salir adelante en una situación que tiene un trámite judicial. Involucrar a alguien del Gobierno no me parece» atinado.
En la ocasión, Boudou volvió a reiterar su denuncia de los «machos en off: hablan con periodistas para generar una operación mediática. Prefiero, cuando hablo, hablar de esta manera. No me gusta mandar mensajes por atrás», disparó, y respondió con un «por supuesto» cuando se le preguntó si hay «machos del off» dentro del oficialismo, aunque evitó dar nombres.
En otro orden de cosas, el vicepresidente desmintió cualquier relación suya con la reestructuración de deuda realizada por The Old Fund para Formosa, y aseguró que «ese trámite fue sustanciado y encaminado por el anterior ministro», al tiempo que agregó que «son decididos y son responsabilidad de las provincias con las empresas que contratan, no por los ministerios».
«No veo un gran escándalo en esta operación de reestructuración de deuda. Todas las provincias que reestructuran deuda pagan comisiones», completó. Cuando realizó la operatoria, The Old Fund tenía un solo empleado, cobró 7 millones de pesos por esa tarea, la cual fue la primera. No figura ninguna otra intervención como empresa.

 

También insistió en la ruta del dinero y sobre el particular pidió que «en vez de concentrarnos en boletas, ¿por qué no nos concentramos en los 50 millones de pesos que andan dando vueltas?».«Moneta es la puerta de entrada para entender la ruta del dinero», aseveró.

«Los 50 millones que prestó Moneta (para levantar la quiebra), que yo no creo que haya prestado, sino que es una maniobra muy parecida a la que hizo los Ciccone con (Alfredo) Yabrán a mediados de los años 90 para hacer las patentes, en ese momento hicieron una especie de pacto de retroventa con las
acciones a través de una inyección de capital que hizo Yabrán», contó.

En ese contexto, Boudou dijo que lo que se hizo es «una operatoria común en la firma Ciccone, no estamos asistiendo a algo nuevo, el vehículo puede tener un día, un año o cinco, lo importante es quién está detrás, me parece muy infantil pensar que lo importante es el nombre de la empresa».

 

 

Sobre el juez Lijo, lo acusó de citarlo para arruinar el acuerdo con el Club de París: «En una causa que lleva más de dos años, justo cuando se soluciona un tema tan importante para Argentina como el acuerdo (con ese grupo de acreedores), se produce mi citación, cuando no había sucedido nada extraño o nuevo que ameritara un llamado», especuló Boudou.

El funcionario nacional también se hizo un tiempo para hablar del ex procurador Esteban Righi. A su criterio, «si renunció es porque quizá habrán sido ciertas las cosas que yo dije», afirmó y agregó: «Hay estudios de abogados que trabajan como nexos con los juzgados».

Núñez Carmona

Quien tampoco quedó bien parado es su amigo y socio Núñez Carmona, a quien, dijo Boudou, le pidió explicaciones por todas las pruebas que lo vinculan con los Ciccone, con Vandenbroele y con hacer negocios poco trasparentes junto con The Old Fund.

Respecto del alquiler de su departamento, Boudou relató que cuando decidió vivir con su novia dispuso rentar su unidad y para que no fuera a través de una inmobiliaria, para evitar costos y trámites, le comentó a su amigo José María Núñez Carmona.

«Me trae un contrato de una persona que vivía afuera, son dichos de él, que comenzaba un emprendimiento en Argentina sobre la compra venta de jugadores de fútbol y tenía interés en comprar un departamento en Puerto Madero», dijo el funcionario, quien agregó: «Yo firmé un contrato en ausente con (Fabián) Carosso Donatiello».

En ese sentido, contó que al analizar cómo fue el tema de las facturas surge que como era de Rosario había confiado en Vandenbroele para que le administre el departamento, pague las facturas.

Por otra parte, respecto a los pasajes que sacó su hermano y que aparecen facturados a nombre de The Old Fund, el vicepresidente explicó que del expediente surge que la empresa de turismo lo que hacía era que «los pasajes que eran consumidor final se lo facturaban a firmas».

«Los pasajes estaban pagando con tarjetas y efectivo», dijo el presidente del Senado, para desmentir que hayan sido pagados por esa empresa y no por su hermano, al detallar que era donde su hermano «tenía confianza» y que en el pasaje «no aparecía la empresa».

Asimismo, sobre los llamados de Núñez Carmona con los Ciccone informó que su amigo tenía pensado comprar un canal y una confitería en Mar del Plata en sociedad con integrantes de esa familia, situación que él desconocía, dijo.

«Yo no controlo la vida de mis amigos», respondió Boudou y se desligó así de todos los elementos que hay en la causa y por los cuales entendió el juez era necesario llamarlo a indagatoria. «Cuando saltó este escándalo yo le pedí explicaciones (a Núñez Carmona)… La verdad que mi relación está mucho más fría. Son demasiadas cosas, que repercuten sobre el funcionamiento del Gobierno. Él debía haberme puesto en conocimiento de algunas cosas que me podían perjudicar, como por ejemplo querer hacer negocios con los Ciccone».

Las «coincidencias»

Hacia el final de la entrevista, el vicepresidente puso especial énfasis en uno de los letrados de la familia Ciccone y, en ese marco, definió como «coincidencias» todos los elementos que lo vinculan con la causa, entre ellos que su amigo Núñez Carmona se relacionó con Vandenbroele, con The Old Fund, con su hermano y con la imprenta de billetes.

Tras mostrar varias fotografías de un abogado comercial acompañando a distintos integrantes de los Ciccone a los tribunales cuando acudían como testigos, momento que no requiere de una defensa, Boudou lanzó: «Que el juez haya convertido de imputados a pobrecitos a los Cicconees por el abogado Marcelo Ruiz. Ya vamos a ver sus coincidencias, que van a ser muy importantes para la causa con actores importantes de la política argentina y el mundo de los negocios».

«Lo que viene también va a haber un montón de coincidencias porque estas coincidencias, son de personajes menores, pero cuando busquemos las coincidencias de Ruiz también van a aparecer coincidencias llamativas», insistió el vicepresidente para luego sentenciar: «Siempre terminó mal todo lo que hicieron los Ciccone».

Y fundamentó sus dichos al recordar que ellos fueron «los que hicieron los ‘menem truchos’ con papel de la Casa de la Moneda, que imprimieron las entradas del Mundial 1978, que negociaron con gobiernos africanos y que cuando asumió Raúl Alfonsín tuvieron que publicar una solicitada para despegarse de supuestas tropelías, y las boletas Kirchner-Boudou, pero no tienen nada que ver con Amado Boudou».