River dio el batacazo, cortó la racha y hundió a Boca
River se sacó la grande. En un partido donde Boca intentó un poco más, pero el empate en definitiva, era un justo resultado, aprovechó una mala salida de Orión y se llevó el Superclásico tras 10 años sin victorias en la Bombonera. De yapa, se puso a 1 de la punta y hundió a Boca.
Los primeros 30 minutos del partido, sin bien no tuvieron la emoción de los goles, fueron los mejores jugados del súper. Con un Boca que asumía la responsabilidad de la localia e intentaba ser el protagonista y el que maneje la pelota, y por el otro lado, River intentaba cortar en el medio con la presión de Ledesma y Rojas y salir rápido con Lanzini y Teo.
Así, el partido era bastante bien jugado por ambos equipos cuando tenían la pelota, y con una entrega propia del clásico en la recuperación. El factor sorpresa de Boca era por el ala izquierda, con un Insúa que pasó constantemente al ataque y lanzó buenos centros al área de River, que nunca pudo conectar el 9 Gigliotti.
Por el lado de River, a la hora de tener la pelota, Ramón aprovechó el hecho que los 3 volantes de River que quitaban y cortaban por medio de la presión, son también jugadores de buen pie, por lo tanto una vez la pelota en posesión del millonario, la pelota era bien jugada hasta llegar a los pies de los delanteros por Rojas, Ledesma y Carbonero.
En el segundo tiempo, con las obligaciones, llegaron los goles y las emociones. Primero, tras un gran quite de Balanta, tocó para Teo (apenas en Off side), el colombiano avanzó y la puso al medio para Lanzini que definió con justeza tras la salida del 1 xeneixe.
El empate local no se hizo esperar, 10 minutos más tarde, a los 22, Riquelme aprovechó una falta cometida al “burrito” Martínez (de buen partido), y clavó un verdadero golazo que dejó parado a Barovero, y desató la fiesta en una bombonera que para ese entonces, temblaba.
Los últimos minutos fueron erráticos, Boca siempre intentando un poquito más pero sin lograr una verdadera superioridad en el juego. Se seguía proyectando Insúa por izquierda, se soltó en otras jugadas Grana por derecha, el burrito desequilibraba de a ratos, y Riquelme (salió a los 38 minutos) participaba en el juego más que Gago, pero esa intención no se plasmaba en llegadas concretas.
Y River, con el “keko” Villalba ya en cancha, ya no jugaba corto como antes, y cuando cortaba el avance de Boca, jugaba rápido para los 3 de arriba que en muchas situaciones jugaban mano a mano contra los centrales “Cata” Díaz y Forlín. Pero a los 39 minutos, Lanzini encara a Grana, se mete en el área y cuando el defensor va al piso le hace revotar la pelota al 10 de River y la manda afuera, sin embargo, Pitana cobra córner.
A partir de ahí, la historia es conocida. gol de Funes Mori, pedido de disculpa de Orión por la responsabilidad con la mala salida, Ramón con una sonrisa imborrable en la cara cuando se retiraba de la cancha, las justificaciones de Bianchi, y la victoria más importante para River en lo que va de la nueva “era Ramón”, que consigue aire extra para seguir con vida en el torneo.