ROMA: Francisco se reunió 50 minutos con Barack Obama
El papa Francisco y el presidente de Estados Unidos, Barak Obama, se reunieron hoy en el Vaticano durante 50 minutos y después pasaron a los saludos y la entrega de regalos. La reunión duró, por tanto, más de la media hora que suelen durar las conversaciones del Papa con los jefes de Estado y Gobierno que lo visitan.Como al resto de mandatarios, Jorge Bergoglio regaló a Obama su primera exhortación apostólica, «Evangelii Gaudium» (La alegría del Evangelio), publicada el pasado 26 de noviembre, y un medallón artístico que representa al «Angel de la Paz», como el mismo Papa explicó a Obama. También Francisco entregó a Obama una colección de monedas de su pontificado, que se cayeron cuando eran mostradas al presidente de Estados Unidos, lo que provocó la risa de ambos. Obama, en tanto, le entregó una caja de cuero con frutas y verduras de la huerta de la Casa Blanca. Parte de las verduras y frutas, dijo Obama a Francisco, «es para obras de caridad en honor del Papa». «Si tiene la oportunidad de venir a la Casa Blanca puede visitar el jardín», sostuvo el mandatario, a lo que Francisco respondió: «Cómo no». «Es un gran honor. Soy un gran admirador suyo», dijo Obama. «Muchas gracias por recibirme», agregó.Obama es el noveno presidente de Estados Unidos que hace una visita oficial al Vaticano. La audiencia significa un cambio en el ritmo de sus actividades ya que dedicó los tres días pasados de su gira, que durará una semana, a promover la unidad europea contra la agresiva postura rusa frente a Ucrania. El Papa con el que Obama conversó es distinto al último que lo recibió. En 2009 visitó a Benedicto XVI en una reunión que fue cordial pero que no generó expectativas debido a las diferencias entre la Iglesia y Obama en el tema del aborto. Sin duda la relación entre el gobierno de Obama y la Iglesia Católica es frágil. Autoridades vaticanas han dicho que el presidente no se iría sin escuchar los puntos de vista del papa sobre la reforma a la ley de salud y su exigencia de que las medidas anticoncepción esté cubiertas por un seguro. Pero en Francisco la Casa Blanca ve a un Papa popular cuyo énfasis en la disparidad económica representa una validación moral de la agenda económica del mandatario.»Dada su gran autoridad moral, cuando el Papa habla sus palabras tienen gran trascendencia», dijo Obama en una entrevista con el periódico italiano Corriere della Sera. «Puede hacer que la gente alrededor del mundo se detenga a pensar sobre sus viejas actitudes y comiencen a tratarse unos a otros con decencia y compasión», completó.