POLITICA: La Comisión Episcopal repudió que la «única respuesta» en la lucha contra narcos sea el debate de una ley para despenalizar la tenencia de drogas
Ante el inminente debate legislativo de proyectos para no penalizar la tenencia de marihuana para uso personal, la Comisión Episcopal de Pastoral de Drogadependencias advirtió sobre la mayor tolerancia social al consumo de sustancias adictivas.
La Comisión sugirió que la vía para combatir el narcotráfico deben ser las políticas públicas orientadas a la educación, la prevención, la salud y el apoyo a los sectores más necesitados.
El organismo de la Conferencia Episcopal Argentina reconoció que hay acuerdo en que no se debe criminalizar al adicto por su enfermedad, pero insistió en rechazar que la legalización del consumo sea el primer paso para combatir el «flagelo» de las drogas.
«Cuando los legisladores deban meditar sobre los motivos o razones por las que se debería liberar el consumo de cannabis, entendemos que simultáneamente deberían reflexionar si el sistema sanitario de nuestro país se encuentra preparado para enfrentar todo lo que conllevaría poner en práctica tal decisión», interpeló.
La Iglesia cuestionó en un documento titulado «¿Despenalización sí o no?» que se justifique esa postura afirmando que «la guerra contra las drogas ha fracasado, el consumo ha aumentado y lo único que se ha logrado es criminalizar al adicto».
«Entonces se dice que la única y la verdadera solución es simplemente despenalizar, confiando en que con esta sola medida se resuelve casi todo el problema», criticó.
Asimismo, exhortó a las autoridades a redoblar los esfuerzos para combatir «las redes mafiosas de los mercaderes de la muerte», al reclamar que no se le dé «espacio al narconegocio».
En ese sentido, hizo votos para que «la sociedad en su conjunto se involucre para formar una verdadera red social que dé respuestas concretas a esta enfermedad de nuestro tiempo».
«La lucha contra la droga se gana en la educación y prevención, creando fuertes vínculos sociales a través de la solidaridad y la búsqueda del bien común», sostuvo.
La Comisión de Pastoral de Drogadependencia lamentó, además, que «no se hayan dado pasos firmes» para implementar la Ley 26.586 que, promulgada en diciembre de 2009, establece el Programa Nacional de Educación y Prevención sobre las adicciones y el consumo indebido de drogas.
También rechazó la iniciativa parlamentaria del senador kirchnerista Aníbal Fernández para legalizar el consumo «recreativo» de estupefacientes, sobre todo la marihuana, y para permitir su autocultivo.
«Un joven pobre que se droga no se está divirtiendo, no hace fiesta ni se dedica a un uso recreativo: huye hacia delante para llegar más rápido al día de su muerte», aseveró.
La Iglesia recordó en este sentido que en marzo de 2009 el Equipo de Sacerdotes para las Villas de Emergencia de la arquidiócesis de Buenos Aires publicó un documento en el que expresaba que la droga «está despenalizada de hecho» en estos asentamientos urbanos.
«Vemos la buena intención de los que buscan no criminalizar al adicto, es una locura criminalizar la enfermedad. Pero intentemos pararnos desde la perspectiva de las familias más vulnerables», sostuvo.
«Sin un buen sistema de salud, sin políticas fuertes de prevención, sin un sistema educativo realmente inclusivo y eficiente, el único encuentro del adicto y su familia que pide ayuda con el Estado es la justicia. Despenalizar en estas condiciones es dejar abandonado al adicto, no hacerse cargo de su derecho a la salud», citó la comisión avalando los argumentos esgrimidos entonces por los curas villeros.fTE.INFOBAE