Entrevista a Horacio Arias, padre de uno de los rugbiers muertos en accidente en 2010
Horacio Arias en una entrevista telefónica con Prisma Radio relata la situación que atraviesan los padres por recuperar los respectivos restos de sus hijos desde noviembre de 2010. El sepelio y su mediatización. La fiscal Carpovich de San Miguel. El intendente Joaquín de la Torre. El estado de «conservación» de los cuerpos en un galpón.
Horacio Arias: Muchísimas gracias por darme su tiempo para que la gente se entere todo el drama que estamos viviendo.
Los chicos tuvieron un accidente yendo a jugar un campeonato de rugby, un accidente de auto común si silvestre, se despistaron, tuvieron la mala fortuna que el coche se incendió y ellos murieron calcinados. Ese es el mayor problema: al no poder reconocer los cuerpos nosotros nos teníamos que quedar ahí en Misiones para que le hagan los estudios de ADN. Resulta que se presentó una comitiva a nombre del intendente de San Miguel diciendo que ellos nos iban a ayudar, que nos quedáramos tranquilos, que ellos lo iban a mover y realmente movieron; llamaron por teléfono a mucha gente importante que liberó los cuerpos en 12hs; el accidente fue un sábado 20 de noviembre (de 2010) y llegaron el domingo 21 (de noviembre de 2010).
Como era feriado, un fin de semana largo, a nosotros nos decían que los restos quedaban en la morgue, en una cámara refrigerada y que recién el martes iban a venir el forense, iban a sacar las muestras e iban a hacer el ADN. Nosotros hasta ahí estaba todo bien. Con todo nuestro dolor entendimos la situación y sabíamos que el ADN iba a tardar 30, 40 días. Pero el domingo 21 (de noviembre de 2010) llegó esta comisión de San Miguel, movió cielo y tierra a través de mensajes telefónicos y el mismo domingo a las 12 de la noche salimos rumbo a Buenos Aires. No pensamos nada extraño.
Hicieron el sepelio multitudinario para todas las cámaras de televisión, el intendente salió en todos los medios; si uds se fijan en Youtube, el intendente sale en todos lados. A continuación del sepelio, en el primer piso de la municipalidad a las 8 de la noche nos dijeron que había que llevarlos a la morgue, nos pareció correcto; los cuerpo no estaban preparados para aguantar en un lugar “x” porque los tenían solamente en cajón de madera.
Se hicieron mal las cosas. Al tercer día los chicos salieron de la municipalidad para ir al Hospital Carrillo nos enteramos a través vecinos indignados por el olor nauseabundo que había: los chicos estaban en el fondo del galpón del dueño de la cochería que tenía que trasladar al Carrillo a los cuerpos. Nos apersonamos al lugar el día miércoles 24 de noviembre (de 2010) y efectivamente a través de una reja nos asomábamos y veíamos los cuerpos. Tenemos fotos en Facebook.
Les sacaron 4 veces muestra de ADN. De Misiones ya vinieron cinco cuerpos con una pulsera identificatoria, cada pulsera tenía seis dígitos, dos de las pulseras tenían el mismo número.
Cuando descubrimos los cuerpos en el galpón; pedíamos a los medios que filmen las cosas, todos los medios que fueron llamados, no podían entrar a San Miguel.
Acá lo que pasó fue de una crueldad sin nombre. El intendente salía en todas las cámaras de televisión diciendo que ayudaba a los ciudadanos de San Miguel, diciendo que eran chicos que él conocía que era verdad, pero eso no implicaba el maltrato que hicieron tirando los cuerpos en el galpón.
Jorge Victorero: Cuándo fue la última vez que lo vio al intendente (Joaquín) de La Torre?
Horacio Arias: El día del sepelio. Después nunca más nos dio bolilla. Nunca más nos atendió. Hace diez meses que él tiene la oportunidad de llamarnos y hacer una nota.
Nosotros encontramos los cuerpos en el galpón a las 4 de la tarde, recién a las 12 de la noche podíamos abrir la puerta del galón porque no nos dejaban (la policía): Uds no pueden entrar, ahí hay cajones vacíos.
Los cuerpos perdían fluído y eran lamidos por los perros.
La cobertura metálica la pudimos poner el jueves 25 (de noviembre de 2010), el miércoles 24 (de noviembre de 2010) estaba la fiscal Carpovich, pero estaba embarazada y no se quería presentar a ir a ver todo ese espectáculo porque decía que le daba asco; cuando fuimos el jueves 25 (de noviembre de 2010) a hacer la denuncia a la fiscalía, a su secretaría, nos dejó entrar pero de a uno; esta fiscal Carpovich le dijo a mi esposa que fue la primera que entró: Por qué no hacen una cosa, yo les libero los cuerpos, Uds agarran un cajón cada uno, hacen el velorio y después los guardan donde puedan, y cuando tengan los resultados se los cambian.
Nosotros no tenemos respuesta del intendente que nos digan por qué tiraron los cuerpos ahí. Hicimos este recurso legal, un pedido de informe, que tampoco le da bolilla.
Ahora exigimos dos cosas: el registro de ese pedido de informe, para ver por qué a mi hijo y a los otros los pusieron en un galón. Qué necesidad había de hacer algo mal si venían bien. Y segundo a raíz de tantas veces que le sacaron restos y demás porque hasta el 13 de enero (de 2011) les volvieron a sacar huesitos a los chicos porque lo hicieron tan mal… tan mal. Recién el 10 de marzo (de 2011) nos dieron los resultados.
Queremos que nos dejen hacer de nuestro bolsillo, una nueva muestra. Lo único que pido, en qué cajón están los restos de mi hijo.
Desgrabación: Antonio Infante para Multimedios Prisma.
Fotografías: Horacio Arias