ELECCIONES 2011: Habló Cristina y dijo que lo ocurrido se debe al reconocimiento de una gestión de gobierno
«Lo interpreto como un reconocimiento a una gestión. Creo en una sociedad que vota positivamente, que votó una gestion de gobierno que viene desarrollándose desde 2003 con errores y aciertos, marchas y contramarchas. Es un reconocimiento al trabajo.
Me he roto el alma en estos cuatro años y él (por Néstor Kirchner) durante ocho», dijo la mandataria, en una rueda de prensa que brindó en Casa de Gobierno.
Acompañada por su compañero de fórmula, el ministro de Economía, Amado Boudou, y todo su gabinete en el Salón Sur, la jefa de Estado remarcó que «lo más importante es que nadie es dueño del voto de nadie» y que «los ciudadanos no tienen propietarios».
«Ninguno de nosotros es propietario de la voluntad de ningún ciudadano, que se expresa libremente ante cada convocatoria de la manera que cree más conveniente, según sus propios intereses», afirmó la jefa de Estado, que ayer obtuvo 10.363.319 votos, lo que representa el 50,70 por ciento de los votos, escrutadas casi el 97 por ciento de las mesas.
En la conferencia de prensa, la mandataria hizo una introducción y respondió preguntas de distintos medios -que fueron sorteados con anterioridad-, en las que se refirió a las primarias que se desarrollaron por primera vez ayer en el país, y remarcó el «récord de concurrencia electoral» que se registró en los comicios.
«Fue una jornada memorable, en la que inauguramos un sistema inédito en la historia institucional argentina, con el que hemos dado un salto cualitativo muy importante, al instalar un sistema que permite la apertura de los partidos a la sociedad, una especia de democracia ampliada», sostuvo.
En ese marco, destacó como el «dato más sobresaliente» de la jornada de ayer fue el «récord de concurrencia electoral» que marcó el 77,82 por ciento del padrón que concurrió a votar, superando los niveles de la elección presidencial de 2007, cuando votó el 76,20 por ciento, y de las legislativas de 2009 en las que sufragó el 76,79.
Remarcó esa alta cifra de participación luego de que «muchos medios aseguraran que iba a ir a votar poca gente, que no había interés o poca difusión» y volvió a resaltar que la ciudadanía «actuó con absoluta libertad», adoptando un «rol activo» y en un «clima de alegría».
«Como Riquelme ambos estamos felices», dijo la presidenta en un tono distendido y relajado, con Boudou parado a su lado, y reveló que el ministro «anduvo haciendo pogo hasta la medianoche» y hasta le cantó el tema «Avanti morocha».
Sobre su contundente performance del día de ayer, la jefa de Estado agregó: «No hay que creérsela, yo nunca me la creí, milito desde muy joven y, pese a que hemos tenido muchos éxitos y también derrotas, siempre aprendí más de las derrotas que de los triunfos».
Al ser consultada sobre la convocatoria a los distintos sectores que hizo ayer en su discurso, Cristina dijo que tanto con empresarios como con sindicalistas se reúne «cotidianamente» y que «sería imposible gobernar sin dialogar con ellos».
En tanto, dijo que el «ámbito» para el diálogo con los partidos políticos de la oposición es el Parlamento, donde «están representadas todas las fuerzas», dijo que los acuerdos «deben traducirse en políticas concretas para la gente» y aprovechó para pedir el «pronto tratamiento» de la ley de tierras que envió al Congreso.
En otra de las preguntas, la mandataria fue consultada sobre posibles cambios de gabinete para un segundo mandato, si triunfa en las elecciones del 23 de octubre. «Primero cazemos la liebre y después vemos como se arma el guiso. Oportunamente veremos», contestó.
También destacó como «muy bueno» el gesto del reelecto jefe de gobierno porteño y líder del PRO, Mauricio Macri, quien la llamó desde Europa esta mañana para felicitarla por el triunfo.
«Le pregunté cómo estaba vestido y me dijo con bermudas, en un crucero por las costas italianas. Suertudo él», dijo risueña la Presidenta, en referencia a que cuando Macri logró la reelección en la ciudad recibió el llamado de felicitación de Cristina «en calzoncillos», según él mismo reveló.
Otra de las preguntas estuvo referida al sistema de boleta única, que ya se aplicó en las elecciones provinciales de Santa Fe y Córdoba.
Al respecto, Fernández de Kirchner mencionó las dificultades en la aplicación de ese sistema en esos distritos y, si bien indicó que no está «cerrada a ninguna discusión», manifestó su preferencia por el sistema que se viene aplicando actualmente a nivel nacional.
En ese sentido, remarcó que las boletas de colores y con las fotos de los candidatos que se aplicó en las primarias de ayer por primera vez -sumado a la publicidad electoral en los medios de comunicación- permitió «una identificación mejor» de los candidatos y sus propuestas.