FUTBOL: Boca le ganó a River 2 a 0 y Martin Palermo se retira con gloria
Con goles de Carrizo, en contra, y Palermo, en el último clásico de su carrera profesional, el «Xeneize» venció al «Millonario» por 2 a 0. Así, los dirigidos por Falcioni lograron su segunda victoria consecutiva y profundizaron la crisis del equipo de J.J.López, que quedó cerca de la Promoción. El árbitro fue Patricio Loustau, tuvo una mal desempeño y expulsó a Matías Almeyda y Clemente Rodríguez.El Superclásico siempre es un partido especial y que paraliza al mundo entero. En esta ocasión la situación no fue diferente. En un encuentro mal jugado, con poco fútbol asociado ni claridad para llegar a los arcos, Boca derrotó por 2 a 0 a River, lo dejó literalmente en llamas y muy complicado con los promedios del descenso. Una «Bombonera» repleta vibró con el triunfo «xeneize», que se puso en carrera por la clasificación a la Copa Sudamericana y disfrutó que su rival de toda la vida aumentó su preocupación de cara a la posible caída en la zona de Promoción.
La visita había arrancado mucho mejor de la mano de Erik Lamela, quien tuvo un buen desempeño con su zurda pudo desequilibrar y se hizo difícil de marcar para el mediocampo local. Pero es la historia de siempre: esta clase de cotejos no se merecen, sino que se ganan. Mariano Pavone luchó más de lo que jugó, Rogelio Funes Mori lució desconectado y la llegada al arco contrario se hizo cuesta arriba y con poca transparencia.
Juan Román Riquelme no la había tocado, tampoco Martín Palermo, menos aún Pablo Mouche y los volantes ofensivos de Boca. Pero en un tiro de esquina, apenas la rozó Luciano Monzón, Juan Pablo Carrizo calculó mal, se pasó, y se le vino encima el balón: no tuvo reacción y la mandó directamente adentro de su valla. Iban 28 minutos y el resultado era injusto.
Previo al gol, hubo un claro penal de Juan Manuel Insaurralde (quien encima ya estaba amonestado y merecía la segunda tarjeta) sobre Funes Mori, que Patricio Loustau obvió. Y luego le cobraron un offside inexistente a Lamela cuando se iba de cara a Cristian Lucchetti. Dos fallos clave que podrían haber cambiado el desarrollo del juego.
Y rápidamente, sin dejar tiempo a nada, vino otro balón aéreo sobre el arco de River: tras una serie de rebotes, el arquero «millonario» dudó, se quedó y no pudo sacar un delicioso impacto de cabeza del «Titán», quien puso el 2 a 0 y definió a la media hora el Superclásico. Fue el 18° tanto del goleador al conjunto de Núñez, contando todos los partidos, justo en el último de su trayectoria.
Desde ahí en adelante, «El Xeneize» dominó los tiempos y a su antojo las alternativas. Los de Jota Jota se dejaron dominar por el nerviosismo y en todo momento estuvieron distantes a volver a meterse de lleno en el partido. Los de la Ribera no pudieron hacer más diferencia porque sus jugadores no estuvieron finos, sobre todo Riquelme.
El tiempo pasaba y todo continuaba de la misma manera, el marcador parcial ya hablaba por sí solo. River fue pura impotencia y desde el banco se ausentaron las soluciones. Lo peor ocurrió a los 49 minutos del segundo tiempo, cuando se enfrentaron e insultaron Clemente Rodríguez y Matías Almeyda. Ambos vieron la tarjeta roja y se desencadenaron una serie de tumultos que mancharon el final del Superclásico. Como si no hubiera sido suficiente, el capitán visitante se retiró besándose la camiseta de cara a la popular local, pronunciando palabras agresivas y empujándose con tres policías que lo custodiaban.
Los de Julio César Falcioni llegaron a cinco partidos sin perder y lograron su segundo éxito consecutivo. Ahora tienen 21 unidades en el Torneo Clausura y 46 en la general, para quedar a dos de Lanús (todavía debe jugar ante Vélez), que es el último que estaría entrando a la Copa Sudamericana.
«La Banda» se quedó en 22 puntos y se olvidó del campeonato: sabe que su pelea estará más que nunca por salvarse de la Promoción. Si Olimpo supera a Independiente, caerá en esa zona igualado con la entidad de Avellaneda. La próxima jornada recibirá a San Lorenzo, en otro clásico caliente y fundamental.
La figura del encuentro fue Cristian Chávez. Dentro de la mediocridad que se apoderó del duelo, «El Pochi» fue de los más claros y activos, además de que tuvo gran participación en el rendimiento defensivo de su equipo. También fue buena la tarea de Cristian Lucchetti, respondiendo en los envíos aéreos o en las pocas chances que creó River. En el perdedor, Erik Lamela fue el único valor rescatable.
FORMACIONES:
Boca: Cristian Lucchetti; Clemente Rodríguez, Matías Caruzzo, Juan Manuel Insaurralde, Luciano Monzón; Cristian Chávez, Leandro Somoza, Nicolás Colazo; Juan Román Riquelme; Pablo Mouche y Martín Palermo. DT: Julio César Falcioni.
River: Juan Pablo Carrizo; Jonathan Maidana, Alexis Ferrero, Adalberto Román; Paulo Ferrari, Walter Acevedo, Matías Almeyda, Roberto Pereyra; Erik Lamela; Rogelio Funes Mori y Mariano Pavone. DT: Juan José López.
RESUMEN DEL PARTIDO:
Amonestados: PT 12´ Juan Manuel Insaurralde (B), 17´ Leandro Somoza (B), 32´ Alexis Ferrero (R). ST 3´ Matías Caruzzo (B), 18´ Juan Román Riquelme (B), 25´ Matías Almeyda (R).
Expulsados: ST 49´ Clemente Rodríguez (B) y Matías Almeyda (R).
Goles: PT 28´ Juan Pablo Carrizo -en contra- (B), 30´ Martín Palermo (B).
Cambios: PT 22´ Leandro González Pirez por Jonathan Maidana (R). ST 19´ Manuel Lanzini por Walter Acevedo (R), 35´ Lucas Viatri por Martín Palermo (B), 39´ Walter Erviti por Pablo Mouche (B), 45´ Ricardo Noir por Juan Román Riquelme (B).
Cancha: La Bombonera