EGIPTO: El vicepresidente Suleimán promete diálogo sigue la represión y El ministro de Sanidad confirma trece fallecidos y 1.200 heridos
El centro de El Cairo se ha convertido de nuevo en el escenario de una batalla campal donde la violencia y los actos vandálicos no han cesado, a pesar de que los militares optaron hace unas horas por abrir fuego, al aire, con el objetivo de dispersar los enfrentamientos. Lejos de diluir el caos instalado en las calles de la capital egipcia desde hace dos días, los disparos se han perdido entre el ruido de la plaza de la Liberación, centro neurálgico de los enfrentamientos, y los detractores de Mubarak se mueven por la ciudad con un único objetivo: silenciar cualquier voz discordante con el régimen. Mientras los periodistas y los miembros de ONG buscaban ayer lugares seguros para evitar linchamientos y robos, hoy han sido asaltados en sus propios hoteles, han esquivado balas y navajazos y algunos han sido detenidos. Mientras, el Gobierno, a través de una entrevista concedida por el vicepresidente Oman Suleimán, ha negado cualquier implicación con los actos violentos y ha prometido que mantendrá un diálogo con la oposisón para iniciar reformas constitucionales.Aunque el vicepresidente egipcio ha insistido en la idea de evitar el caos en el país manteniendo el poder dirigido por Mubarak, el hecho es que los enfrentamientos son cada vez más preocupantes. Ya se ha confirmado que seis periodistas catalanes, integrantes del programa de TV-3 30 minuts, han sido arrestados por la policia militar egipcia y trasladados en un autobús con los ojos vendados. Más tarde, a través de Twitter , han confirmado que se encuentran bien y que esperan ser liberados a lo largo del día. Nada mas conocer la detención y las agresiones, la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha pedido a las autoridades egipcias que garanticen la seguridad de los periodistas españoles y, en general, de toda la prensa extranjera.
Con la violencia instalada en las calles de El Cairo, Suleiman se ha sentado frente al espectador de la televisión estatal egipcia y ha mantenido un discurso en el que no asume ninguna responsabilidad en los enfrentamientos de la capital. El vicepresidente ha avisado que «si continúan las protestas, el país estará paralizado», por lo que un tercio de los ingresos del país se verán afectados. Además, se ha mostrado inflexible ante las presiones internacionales y ha recalcado que «es inaceptable» que países extranjeros se entremetan en sus «asuntos internos». Aunque no ha permitido ninguna injerencia internacional , el vicepresidente sí ha prometido diálogo con la oposición.
Suleiman ha asegurado que Mubarak cumplirá con su palabra y abandonará el poder en septiembre tras las elecciones presidenciales, a las que tampoco se presentará su hijo Gamal, y ha apremiado a todos los grupos políticos a que participen en el diálogo con el Gobierno para llevar a cabo las reformas necesarias. Suleiman ha subrayado que Mubarak ya ha cumplido las «demandas legítimas» formuladas por los egipcios y ha insistido en la idea de que no se presentará a su reelección en septiembre. «Tampoco ningún miembro de su familia se presentará», ha recalcado. Según el ex jefe de los servicios de Inteligencia, los que piden la dimisión del presidente quieren el «caos», porque no puede haber «un estado sin cabeza».Fte.elpais.com