viernes 26 de abril de 2024 07:02:00

INSEGURIDAD: La presidenta encabezó un acto dedicado exclusivamente a la inseguridad

Por primera vez en su gestión, Cristina Kirchner ayer encabezó un acto exclusivamente vinculado con la inseguridad. Ante los 6000 gendarmes que patrullarán el conurbano bonaerense desde el 1° del mes próximo, la Presidenta cuestionó a los jueces que permiten polémicas excarcelaciones y respaldó la acción de las fuerzas de seguridad. Además, pidió dejar de lado el discurso que indica a la exclusión social como causa del aumento del delito, con críticas tanto a sectores que postulan “mano dura” como a aquellos que adoptan posiciones “garantistas”.

“Las fuerzas de seguridad se ven desanimadas cuando tardan días de investigación para aprehender a alguien que cometió un delito y, por uno u otro motivo, los jueces los dejan en libertad. Esto no es ser garantista ni mano dura, es ser criterioso y lógico, nada más que eso”, dijo en la Escuela de Gendarmería, en Ciudad Evita.

En anteriores ocasiones, la Presidenta, al igual que su marido, había criticado a los jueces por la supuesta liberación anticipada de detenidos. Pero en su mensaje de ayer hubo un cambio importante: hizo propios los cuestionamientos de las fuerzas de seguridad sobre la deficiente actuación judicial en la lucha contra el delito.

“Aspiramos a que cada uno cumpla su función: las fuerzas de seguridad, dar seguridad, y la Justicia, hacer justicia, que significa castigar a los que delinquen con las penas que establecen los códigos y, cuando la peligrosidad es tal, no permitir su libertad”, afirmó la jefa del Estado.

Pidió, además, que sean detenidas las personas que fueron vistas por televisión en ataques a los policías en el predio tomado en Villa Lugano.

Agregó su visión sobre la controversia alrededor de las formas de combatir el delito: “Decir que la inequidad social o la pobreza son la causa de la delincuencia es no entender que también existe el crimen organizado”, consideró.Presentó así Cristina Fernández de Kirchner el Operativo Centinela, que fue anticipado por La Nacion en su edición del 15 de noviembre. Explicó que más de 6000 gendarmes y 443 vehículos reforzarán la presencia que ya tiene esa fuerza de seguridad federal en el Gran Buenos Aires, donde actúa en la vigilancia de estaciones ferroviarias, en el control en autopistas y en Fuerte Apache, en Tres de Febrero, y La Cava, en San Isidro. Especificó la Presidenta que se destinarán 150 millones de pesos a la puesta en marcha de ese plan.
Municipios agregados

En un posterior encuentro con la prensa, la ministra de Seguridad, Nilda Garré, y el jefe de la Gendarmería, comandante general Héctor Schenone, ampliaron algunos detalles del plan de seguridad. En principio se había diseñado un operativo tendiente a reforzar la vigilancia en villas de la zona sur y oeste del conurbano.

En la presentación de ayer se agregaron los municipios del Norte, destinándose a cada zona 2000 gendarmes para trabajar tanto en controles de asentamientos por saturación como en acciones sorpresivas. El aumento en las zonas de control -y la consecuente división de fuerzas disponibles- tendría que ver con las presiones de todos los intendentes en pos de contar con gendarmes en sus territorios.

El esquema de seguridad será analizado hoy en una reunión de las autoridades del Ministerio de Seguridad, la Gendarmería y funcionarios bonaerenses. Por lo pronto, un grupo de diez intendentes encabezados por el jefe comunal de Florencia Varela, Julio Pereyra, anticipó su apoyo al envío de gendarmes al conurbano.

La oposición también destacó el uso de la Gendarmería, aunque puso algunos reparos al alcance de la medida. Para Francisco de Narváez, “la participación de gendarmes en tareas de seguridad responde al reclamo de los bonaerenses por una situación que empezaba a estar fuera de control”. Y agregó: “Espero que no sea un parche más”. Por su parte, Patricia Bullrich indicó: “Está bien enviar gendarmes al conurbano, pero es una medida de corto plazo”.

Las mayores críticas llegaron por las quejas de la Casa Rosada al trabajo judicial. El presidente de la Federación Argentina de la Magistratura (FAM), Abel Fleming, discrepó con la Presidenta: “Seguramente tiene razón en que la policía pueda sentirse desanimada, pero la solución no es encarcelar sospechosos a diestra y siniestra sino aumentar las sentencias mediante la profundización de la reforma judicial, que requiere apoyo del Poder Ejecutivo”.
La mirada de Cristina Kirchner sobre el delito

La jefa del Estado pronunció un fuerte discurso en la Escuela Nacional de Gendarmería

* “Hacer justicia significa castigar a los que delinquen con las penas que establecen los códigos y cuando hay peligrosidad no permitir su libertad”

* “Las fuerzas de seguridad se ven desanimadas cuando tardan días de investigación para aprehender a alguien y los jueces lo dejan en libertad”

* “Decir que la inequidad social o la pobreza es la causa de la delincuencia es no entender que también existe el crimen organizado”. Fte.lanacion.com.ar