ECONOMÍA: EN MARZO SE FRENÓ LA ACTIVIDAD ECONÓMICA POR LA ACELERACIÓN DE LA INFLACIÓN Y LAS TENSIONES CAMBIARIAS
Los primeros datos del mes pasado relevados por el mercado muestran que distintos indicadores sectoriales tuvieron retrocesos en relación con febrero, que había sido un mes de marcada mejora de 0,8% mensual

Por Mariano Boettner. La actividad enhebró hasta febrero 10 meses consecutivos de mejora mensual. EFE
Tras la marcada aceleración de la actividad económica en febrero, que registró un 0,8% mensual según informó esta semana el Indec, marzo podría haber observado un freno a esa tendencia, en un contexto de repunte del índice de inflación y en medio de tensiones cambiarias previas al acuerdo con el FMI y la puesta en marcha del nuevo esquema cambiario. A pesar de eso, la economía estaría cerca de alcanzar el techo de actividad de los últimos años que tuvo lugar en el cuarto trimestre de 2017.
Así lo marcaron distintas consultoras privadas que miden indicadores sectoriales para tener un primer pantallazo sobre la actividad general. El organismo estadístico indicó el martes pasado que enero y febrero tuvieron indicadores positivos con un 0,6% y 0,8% respectivamente en el Estimador Mensual de la Actividad Económica (EMAE) de cada mes.
La nueva aceleración del IPC podría haber tenido un efecto inicial sobre ese ritmo con el que llegaba la economía al cierre del primer trimestre. La actividad, en términos generales, había tocado piso entre abril y mayo del año pasado y desde ese momento enhebró diez meses sin caídas.
De todas formas, los datos preliminares sectoriales muestran otra foto para marzo. El anticipo de EMAE elaborado por Equilibra prevé una mejora interanual de 5%, en relación con marzo del 2024, pero una interrupción de la tendencia de mejora mensual con un retroceso de 1% en comparación con febrero. En la misma tónica, el EMAE que excluye al sector agropecuario trepó 5,1% anual pero una caída de 1,2% contra febrero.
“De esta forma, el primer trimestre del año cerraría con un alza de 5,8% en comparación con el primer cuarto de 2024. A su vez, la serie desestacionalizada arrojaría un crecimiento de 1,6% en los primeros tres meses del año versus el último cuarto de 2024, quedando 0,7% por debajo del récord histórico (cuarto trimestre de 2017)”, indicó Equilibra.
En ese sentido, plantearon que “por la aceleración inflacionaria de marzo, la modificación del esquema cambiario a mediados de abril y un contexto internacional más adverso, esperamos que la economía crezca 5% en 2025 (en lugar de la estimación previa de 5,5% anual)”, reajustó esa consultora.
Por su lado, LCG indicó en coincidencia que “los datos de actividad correspondientes a marzo resultan menos alentadores que los registrados en febrero, posiblemente afectados por un escenario de mayor incertidumbre a partir de expectativas crecientes sobre un cambio de régimen cambiario, que se confirmaron con la liberación de las restricciones a mediados de abril”, mencionó un informe reciente luego de conocerse el EMAE de febrero por parte del Indec.
“Concretamente, en marzo se registró una caída en la recaudación asociada a impuestos internos como IVA y Créditos y Débitos; las importaciones de bienes de consumo retrocedieron un 9,3% en términos desestacionalizados, interrumpiendo una racha de tres meses consecutivos de subas; la confianza del consumidor mostró una baja significativa (la más pronunciada desde septiembre 2024); las ventas de bienes durables profundizaron su caída; y los indicadores vinculados a la producción industrial tampoco mostraron señales positivas”, enumeró esa consultora, que elaboró un semáforo sectorial con los últimos datos actualizados de marzo que, en relación a febrero, muestran en distintos casos reversiones de números positivos a retrocesos.
Por último, LCG apuntó que “con la información disponible al momento, esperamos un freno de la actividad en marzo con cierto arrastre a abril. Para adelante, proyectamos un sendero de crecimiento débil y algo más errático, sujeto al impacto del reacomodamiento de precios relativos pendiente, y concentrado en pocos sectores”.
Econviews fue más allá y proyectó cuál será el efecto inmediato de la implementación del nuevo esquema cambiario. “La actividad económica se verá afectada en el corto plazo y los salarios reales caerán, aunque deberían recuperarse en el último trimestre”, consideró la consultora que dirige Miguel Kiguel.
Semáforo sectorial elaborado por LCG: marzo registra algunas reversiones de números positivos en comparación con febrero
“Los sectores exportadores y la construcción podrían verse beneficiados si el tipo de cambio real resulta más alto, mientras que el consumo sufrirá. A mediano plazo, el panorama es positivo: el levantamiento del cepo cambiario y un tipo de cambio real más competitivo deberían impulsar la IED (inversión extranjera directa), la competitividad y la confianza del sector privado”, completó.
Un indicador sectorial clave para el PBI como la industria también mostró síntomas de agotamiento en marzo, de acuerdo a un informe de la Fundación FIEL. “La industria registró en marzo una nueva mejora en la comparación interanual acumulando en el primer trimestre un moderado avance. En la medición desestacionalizada, marzo registró una caída mensual, al tiempo que los datos de frecuencia trimestral resultaron en un impasse en la recuperación observada en el segundo semestre del año pasado”, informó a clientes este miércoles.
En concreto, la mejora interanual fue de 1,6% y la contracción en comparación con febrero fue de 1,4 por ciento. “La realización de paradas de planta en diversos sectores en marzo, explica el recorte en el ritmo de avance de la industria, el que resultara transitorio. Dada la magnitud del freno de la actividad en el primer semestre de 2024, la industria debería mostrar una mayor dinámica en el segundo trimestre del presente año”, indicó FIEL.
De todas formas, el informe aseveró que “no obstante existen desafíos del contexto local e internacional -excepto para actividades puntuales- para sostener una dinámica de crecimiento similar a fases previas, comenzando con el hecho de que en abril se realizan nuevas paradas de producción al tiempo que se trata de un mes corto producto de los feriados de Semana Santa”, concluyó.Fte. I