ECONOMÍA: EL FMI CONFIRMÓ UE LOS DESENBOLSOS SERÁN EN TRAMOS PERO EVITÓ DAR PRECISIONES SOBRE EL MONTO FINAL DEL ACUERDO
Desde Washington, Kozack sostuvo que las negociaciones con el Gobierno nacional están «muy avanzadas» y que el tamaño del paquete será «significativo», aunque su dimensión exacta será determinada por el Directorio Ejecutivo
El Fondo Monetario Internacional (FMI) confirmó este jueves que los desembolsos del nuevo programa financiero con la Argentina se realizarán en tramos, aunque evitó precisar el monto total del acuerdo. La declaración de Julie Kozack, vocera del organismo, contrastó con el anuncio realizado por el ministro de Economía, Luis Caputo, quien más temprano había revelado un entendimiento por 20.000 millones de dólares.
Desde Washington, Kozack sostuvo que las negociaciones con el Gobierno nacional están «muy avanzadas» y que el tamaño del paquete será «significativo», aunque su dimensión exacta será determinada por el Directorio Ejecutivo. “Como en todos nuestros programas, los desembolsos se realizarán en cuotas. La programación exacta y el tamaño de cada tramo son parte de las discusiones en curso”, señaló la funcionaria durante su habitual conferencia de los jueves.
Caputo había anticipado que el acuerdo alcanzado con el staff técnico contempla un crédito de 20.000 millones de dólares, y que se negocia además un paquete adicional con organismos multilaterales como el Banco Mundial, el BID y la CAF. En total, el Gobierno proyecta elevar las reservas brutas a 50.000 millones de dólares, aunque sin detallar el ritmo en que se harían los desembolsos.
El mensaje del ministro llegó en un momento clave, en medio de la escalada del dólar blue —que superó los $1.300— y tras ocho jornadas consecutivas de ventas del Banco Central. La urgencia por recomponer reservas es compartida por el equipo económico y reconocida incluso por el FMI, aunque las condiciones del programa continúan bajo discusión.
Condicionalidades, metas y presión de los mercados
Según fuentes cercanas a la negociación, uno de los puntos aún abiertos es el esquema cambiario. Se baraja la posibilidad de implementar bandas cambiarias —con un piso y un techo para el tipo de cambio oficial— junto a una apertura gradual del cepo. También se analiza una modificación del dólar blend, reduciendo el porcentaje de liquidación en el contado con liquidación (CCL).
A cambio de los fondos, el Fondo exige profundizar las reformas estructurales. “Existe un reconocimiento compartido sobre la necesidad de seguir adoptando un conjunto coherente de políticas fiscales, monetarias y cambiarias”, expresó Kozack. Y destacó que las medidas impulsadas por el Gobierno “comienzan a dar resultados”, como la recuperación de la actividad, la suba de salarios reales y una incipiente baja en la pobreza.
Un programa en construcción con respaldo técnico
La portavoz del organismo señaló que las conversaciones incluyeron “reuniones intensas y productivas” tanto en Buenos Aires como en Washington, con participación de funcionarios de alto nivel. Aunque no se publicó aún un Staff Level Agreement (SLA), el Ejecutivo argentino busca acelerar los tiempos para obtener el primer desembolso cuanto antes.
En paralelo, el vocero presidencial Manuel Adorni confirmó que los 20.000 millones de dólares serán de “libre disponibilidad” y permitirán sanear el balance del Banco Central, lo que representaría un giro respecto de acuerdos anteriores con condicionalidades más restrictivas.
El Gobierno avanza con respaldo, pero el Fondo marca el ritmo
El entendimiento con el FMI se da en el marco de un proceso de saneamiento económico que comenzó en diciembre de 2023 y que ya logró bajar drásticamente el déficit fiscal, ordenar las cuentas públicas y restaurar la confianza del mercado. Sin embargo, la cautela del Fondo deja en claro que el monitoreo será permanente y que cada etapa del acuerdo dependerá del cumplimiento de las metas pactadas.
Mientras tanto, el kirchnerismo y sectores vinculados a la vieja política —los mismos que llevaron al país al borde del default— se limitan a sembrar dudas y obstaculizar cualquier avance, incluso a costa de la estabilidad. El Gobierno de Javier Milei, en cambio, apuesta a consolidar el plan de estabilización con responsabilidad y realismo, buscando el respaldo internacional que le permita sostener el rumbo y blindar las reservas.
