JORGE MACRI BUSCA NEGOCIAR CON LA OPOSICIÓN PARA LOGRAR LA SUSPENSIÓN DE LAS PASO EN CABA
El jefe de gobierno porteño necesita reunir los votos del peronismo. En caso de lograrlo, las elecciones porteñas se adelantarían unos meses
El PRO busca reducir la ventaja temporal de La Libertad Avanza para equilibrar la competencia por el poder. En el círculo de los Macri, se asume que Javier y Karina Milei están enfocando parte de su estrategia electoral en desplazar al PRO como fuerza dominante en la Ciudad de Buenos Aires.
Por su parte, Jorge Macri trabaja en un plan electoral que busca asegurar la estabilidad de su gestión, evitar una victoria libertaria en su distrito y consolidar la supremacía de su partido en su bastión principal. Este esquema comienza con una jugada clave: reunir los votos necesarios para suspender las PASO.
Suspender las PASO en la Ciudad, el primer objetivo de Jorge Macri
La meta es conseguir el respaldo suficiente en la Legislatura para aprobar esta reforma en febrero. Actualmente, las negociaciones con el peronismo, que son fundamentales, están en un punto muerto, lo que ha llevado al alcalde a intensificar las conversaciones para dar este giro estratégico.
La suspensión de las PASO adelantaría el enfrentamiento electoral entre el PRO y La Libertad Avanza. Si el sistema de primarias se elimina temporalmente este año, Jorge Macri está evaluando la posibilidad de adelantar las elecciones legislativas porteñas a mayo o junio. Esto permitiría desvincular el debate local del contexto nacional y evitar que las negociaciones para el Congreso interfieran en la definición de las listas legislativas.
Se trata de una maniobra política compleja, diseñada para expertos, que, aunque distante de las preocupaciones cotidianas de los ciudadanos, tiene un impacto directo en la dinámica del poder. Jorge Macri necesita el apoyo del peronismo para alcanzar los 40 votos necesarios para suspender las PASO. Antes de eso, requiere garantizar 31 votos para el quórum, lo que exige una habilidad política significativa, ya que el bloque oficialista es heterogéneo y sus aliados suelen negociar su lealtad. El PRO no cuenta con una mayoría suficiente para imponer su agenda de manera unilateral, lo que representa uno de los principales retos para esta gestión legislativa.
En cuanto a los aliados, se espera que el radicalismo liderado por Daniel Angelici, con Martín Ocampo a la cabeza de la UCR en la Ciudad, respalde la suspensión de las PASO. Sin embargo, otros sectores aún no han definido su postura. Confianza Pública, encabezado por Graciela Ocaña, se inclina más por eliminar definitivamente las primarias y unificar la votación en octubre junto con las elecciones generales, una propuesta que no convence al macrismo.
Por su parte, el respaldo del peronismo es crucial para conseguir los 40 votos necesarios. Unión por la Patria es un espacio diverso, con figuras que van desde La Cámpora hasta el PJ porteño y otros sectores locales. Juan Manuel Olmos, auditor general de la Nación, es clave para articular entre las distintas facciones, junto con figuras como Víctor Santa María y Mariano Recalde. Sin embargo, el peronismo aún no tiene una posición unificada sobre la suspensión de las PASO. Según un legislador porteño del espacio, la decisión dependerá de Cristina Kirchner, aunque un diputado nacional del mismo sector considera complicado coordinar una postura común entre Nación, Provincia y Ciudad. Fte.iP