PLAN «NO HAY PLATA»

POR DAVID SENA: En el inicio de una nueva era en la democracia argentina, podríamos iniciar analizando muchas aristas de lo que ha sido la asunción del flamante Presidente de la Nación, Javier Gerardo Milei.

Sin embargo, es menester de este servidor ponerlos en situación de lo que está ocurriendo por estos momentos y es imprescindible que el común de las personas comprenda en dónde es que estamos parados. Es por ello que debemos hacernos esta pregunta ¿Cómo está la Argentina hoy? Es una pregunta que la debemos plantear  como si de un enfermo terminal se tratase y lo cierto es que para responderla, debemos ser sinceros y dejando de lado todo tipo de fanatismo político o ideológico.

En primer lugar, cabe resaltar que el estado en que ésta nueva gestión  recibe al aparato estatal es pobrísimo y con una inflación que rosa la “hiper”, desocupación “real” en números desorbitantes y ningún vestigio de mejora en el futuro a corto plazo. Si bien, la asunción fue emotiva, se volvieron a las tradiciones patrióticas y verdaderamente, ha sido una fiesta de la democracia, hay que reconocerlo; a todo esto se le suma que los integrantes de la gestión saliente se mostraron  colaborativos ante los ojos de la sociedad, cosa que en otros tiempos no fue así. Pero, retomando el tema, el acto protocolar ya pasó y ahora es tiempo de descolgar las guirnaldas, los globos y llegó el tiempo de arremangarse para trabajar.

En tal caso y si de trabajar hablamos, debemos mencionar que se vienen tiempos difíciles, la era Milei tiene una agenda auspiciosa en la que pretende realizar cambios profundos, que se traducen en ajustes y los pretende hacer sin prisa, pero sin pausa. Lo que sí dejó bien en claro es que no apostará al gradualismo, con lo que se vienen medidas de “shock” (de una sola vez). El presidente lo dijo de forma literal: “No hay plata” y no es un eslogan, es la realidad de la Argentina.

Ahora bien, el pueblo no debe entrar en pánico, habrá que esperar qué sucederá con las medidas que anunciará el Ministro de Economía, allí está la clave y desde ese punto de partida, ir viendo cómo se van a ir dando las cosas. Es importante resaltar que “la fiesta” de unos pocos ya terminó y ahora nos toca pagar la factura, el ticket viene con el siguiente detalle:

• Subsidios (TODOS): Los que financiaron psicológicamente la permanencia en el gobierno a los que se fueron.
• Seguridad: Altos costos que tendremos que pagar por haberla descuidado, quizá por conveniencia… pero hay que pagar.
• Pobreza: La inflación (por no decir hiper) es la mentira bien maquillada para asegurarse la permanencia.
• Producción: Es la que no tenemos en estos momentos y que vamos a tener que pagar para salir adelante.

En fin, podría enumerar cientos de cosas y miles también, pero la realidad es que no se avecinan tiempos cómodos, “NO HAY PLATA”. Solamente sabemos que son tiempos de esperanzas renovadas y en estas últimas décadas es mucho decir.