EL BANCO CENTRAL VENDIÓ $100 MILLONES POR LA DEMANDA DE DOLARES
La insistente demanda de bancos para responder a sus clientes que querían comprar el cupo mensual de 200 dólares motivó un volumen de negocios elevado, algo inusual para un día sin actividad en Wall Street
La Argentina comenzó una activa semana con el debut de la heterodoxa Silvina Batakis al frente del Ministerio de Economía, en momentos que el país sufre una alta inflación y desaceleración en la actividad. Una de las actividades que desempeño la funcionaria este lunes fue la de reunirse con el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, para conversar acerca de los niveles de emisión y reservas en manos de la entidad.
Fuentes del mercado indicaron que el Banco Central asistió con ventas de USD 98 millones a la plaza de contado (spot), en una rueda con importante volumen de negocios, próxima a USD 600 millones, algo inusual debido al feriado en los EEUU que siempre recorta el nivel de la operatoria doméstica.
“Muchas demanda de dólar ‘solidario’” en bancos justificó la intervención oficial, en un día tenso por el inesperado recambio de ministros en el Palacio de Hacienda que potenció la demanda de ahorristas que acceden a su cupo mensual de 200 dólares. Muchos bancos tuvieron dificultades y demoras para operar a través de su homebanking durante gran parte de la jornada.
Hay que recordar que la entidad monetaria debió desprenderse de unos USD 190 millones el viernes por su participación cambiaria.
La autoridad monetaria acumula en lo que va de 2022 compras netas por unos USD 1.554 millones, un monto que representa el 23% del saldo neto a favor obtenido en el mismo lapso del año pasado, que acumulaba unos USD 6.727 millones al 2 de julio de 2021.
El Banco Central estuvo también muy activo en el mercado de dólar futuro, donde operó más de USD 2.000 millones para fijar precios y contener las expectativas de devaluación. La entidad estuvo más activa en los contratos con vencimiento en julio, donde se operaron nominales por USD 1.000,5 millones, y agosto (USD 339 millones), con alzas marginales de precios de 0,5% y 1,4%, respectivamente.
Hay que considerar que estos contratos se pactan y liquidan en pesos, aunque atados a la evolución del tipo de cambio oficial.
Con intercambios de escaso volumen, los contratos de ROFEX con vencimiento en diciembre subieron 3,5%, a 183 pesos, mientras que las posturas para enero de 2023 cerraron con alza de 7,5%, a 200 pesos por dólar.
“En el segmento de contado se operó USD 587,6 millones, en futuros MAE (Mercado Abierto Electrónico), USD 399,4 millones, y en el Rofex, USD 1.677 millones”, detalló Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio.
Con la inesperada renuncia el sábado de Martín Guzmán al frente del Palacio de Hacienda, los mercados domésticos transitan caminos con precios mínimos para los activos y máximos para el dólar, en un ambiente sacudido por una creciente aversión al riesgo dado los desafíos económicos propios y los temores a una recesión global.
Los límites que el Banco Central impuso días atrás a las importaciones, en un intento por combatir la escasez de dólares, generarán una aceleración de la inflación y una caída en el nivel de actividad.
“Las reservas que consiguen restringiendo las importaciones, en lugar de ayudar a estabilizar, agudizaran las tendencias estanflacionarias”, aseveró el exministro de Economía, Domingo Cavallo.
Una reestructuración de la deuda pública en pesos, nuevas restricciones cambiarias y una mayor presión tributaria son las recetas que expertos creen que el Gobierno podría aplicar en el segundo semestre del año para evitar una debacle y cumplir las metas acordadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
La plaza financiera local estuvo alterada por los sucesos políticos y falta de liquidez por el feriado en Estados Unidos
“La noticia de que el ministro de Economía, Martín Guzmán, renunció durante el fin de semana apunta a la creciente influencia de la facción (de la vicepresidenta Cristina de) Kirchner en el Gobierno. Desde una perspectiva económica, es probable que esto conduzca a una postura fiscal más laxa que vaya acompañada de una mayor inflación y controles de capital más estrictos. El acuerdo con el FMI del país ya parece estar deshilachado”, sostuvo Capital Economics.
“El ruido político junto con la salida de Guzmán incrementa el riesgo en el mercado. Adicionalmente, la lectura inicial es que Cristina impuso al ministro de Economía o al menos esta alineado a su pensamiento. Quedará por ver cuáles son las primeras medidas, donde cada vez hay menos margen para políticas heterodoxas”, estimó Roberto Geretto, analista de Fundcorp.
La crisis “de deuda soberana se asocia con eventos de imposibilidad de pago de un conjunto de pasivos del sector público, ya sea en moneda extranjera o doméstica, algo que, de ocurrir, se materializa en el default de la deuda, con efectos adversos sobre la economía”, remarcó el agente de liquidación y compensación Cohen. Fte.i