EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES LOS GREMIOS DOCENTES SE OPONEN A ADELANTAR LA CLASES

Las clases en la Ciudad de Buenos Aires comenzarán el 21 de febrero por una decisión del gobierno porteño, así fue comunicada la semana pasada por Larreta junto a su Ministra Acuña. La medida comenzó a tener disidencias y una es la de Jorge Adaro, Secretario Adjunto de Ademys, que dice que es una medida «sin fundamento pedagógico».

En declaraciones en el programa Habrá Consecuencias, de Radio El Destape, Adaro expresa su disconformidad con la medida adoptada denunciando una carencia pedagógica y no ofrece nada a la calidad educativa. Además, se expresó en contra de que sea posible de que estén todos los chicos en las aulas, como dijo la Ministra de Educación de la ciudad, Soledad Acuña.

«El adelantamiento pierde sentido», decía el secretario al ser consultado por Ari Lejalad. La justificación que da, es el nuevo escenario que platea la pandemia desde mediados de diciembre, cuando los casos comenzaron a incrementarse de manera exponencial. Y habla sobre «ciertos problemas» que podrían surgir a partir de esta subida en los contagios.

La pandemia como justificativo

La vacunación, es uno de los puntos que argumenta Adaro. Según el gremialista va a ser imposible llegar al 21 de febrero con el esquema completo en los alumnos. «Para tener condiciones mínimas para un ciclo lectivo hay que tener por lo menos la posibilidad de la vacunación para los estudiantes», expresó. Al día de hoy, hay alrededor de 14,5 millones de vacunas aplicadas a menores de 18 años.

Otro de los ítems señalados es que habrá una falta de docentes en el inicio del ciclo lectivo, debido a los contagios que hay dentro del personal educativo, según argumenta. En sus palabras «hay miles de docentes que tuvieron Covid y van a estar así antes de comenzar las clases». Estos son dos de los puntos, que Adaro comenta que serían un inconveniente para el inicio de las clases en CABA. También, mencionó la falta de protocolos claros para comenzar.

«Nuevamente hay una situación de incertidumbre de estos elementos, con una gobierno que además insiste en tomar medidas de manera unilateral, rechaza las posibilidades de trabajo en conjunto», expresaba Adaro.

«Nuestra intención es tener un protocolo que nos permita estar seguros, estar tranquilos y que las familias confíen en que es el mejor lugar para sus hijos. Pero también que nos permita cuidarnos y que no haga como a fines del año pasado, que las burbujas se pincharan y se interrumpieran todo el tiempo y que al final fuese peor el proceso de clases», dijo la Ministra Acuña cuando dijo que se iba a comenzar las clases el 21 de febrero. Ese mismo día no habló de un protocolo en específico, pero expresó que se verá semana a semana.

Sobre las declaraciones de Acuña

En la entrevista, el Secretario de Ademys, también se refirió a los polémicos dichos de la Ministra de Educación de CABA. Acuña había dicho en charla con Radio Rivadavia que «es muy tarde para salir a buscar» a los alumnos y las alumnas que abandonaron la escuela como consecuencia de la pandemia (y el aislamiento) porque están «perdidos en el pasillo de una villa, ya cayeron en la actividad del narcotráfico o tuvieron que ponerse a trabajar», desestimando así la posibilidad de que puedan reinsertarse en el sistema educativo.

Adaro sobre el tema se mostró en desacuerdo con la Ministra y dijo que «hay que recuperar a esos chicos». Según lo expresado, «hasta el día hoy se ha realizado una política artesanal de parte de los docentes y del personal de las escuelas», porque ellos mismos saldrían «a buscar a los estudiantes que desertaron». Además, mencionó que hay una falta de políticas reales de parte del gobierno porteño para recuperarlos y menciona como agravante los dichos de Acuña.

Se manifestó también sobre la falta de datos oficiales. Denuncio secretismo de parte del gobierno de Larreta y eso dificulta mediciones. Sobre el tema, esta mañana el Ministro de Educación a nivel nacional, Jaime Perczyk, se refirió hoy a la deserción escolar. Este aseguró que «hay datos de todas las provincias» que han sido comunicados «fehacientemente» y detalló que a principios de 2021 «había un millón de chicos que se habían desvinculado o con una vinculación intermitente» y que en los últimos registros «había 500 mil chicos que todavía no habían regresado».Fte. EI