viernes 3 de mayo de 2024 23:44:22

EL DATO DE LAS PRÒXIMAS ELECCIONES QUE PREOCUPA A TODO EL ARCO POLÌTICO: LA BRONCA Y LA APATÌA

Las elecciones son obligatorias para todos, menos para los mayores de 70 años y los 860 mil adolescentes de entre 16 y 18 años. Este año habrá un condicionante obligado que también puede servir de excusa: las sospechas de tener coronavirus

Las elecciones de Salta tuvieron un resultado electoral, pero otro social que preocupa a todos los políticos: la baja participación que hubo. Fue el primer proceso electoral provincial del año y puede dar un marco. Votó menos del 70 por ciento del padrón, con un alto porcentaje de voto en blanco y temen que el fenómeno sea más amplio. La mezcla entre la pandemia y la bronca, puede desalentar la participación. O, como ocurrió en otros momentos más extremos, agitar la “participación negativa”.

La pandemia modificó la vida cotidiana, las rutinas y las decisiones. El Gobierno decidió postergar las elecciones para septiembre y noviembre y aún se ajustan los protocolos para evitar problemas. Incluso hay quienes ven que la propia situación sanitaria puede servir de “excusa justificada” para no ir a votar. El ausentismo, el voto bronca y el voto anulado ponen mal a los dirigentes políticos, sobre todo porque son indescifrables para ellos.

Las elecciones son obligatorias para todos, menos para los mayores de 70 años y los 860 mil adolescentes de entre 16 y 18 años. Este año habrá un condicionante obligado que también puede servir de excusa: las sospechas de tener coronavirus. Si hubo elecciones que coincidieron con “epidemias” de gastroenteritis, la posibilidad de que haya un pseudo brote de covid el 12 de septiembre y el 14 de noviembre está latente.

El nivel de participación en las elecciones siempre está por encima el 70% y en las últimas elecciones presidenciales a nivel nacional fue del 76,4%. Además del ausentismo hay otro temor: el voto bronca. La diferencia no hace mella en cuanto al recuento de votos positivos, pero sí al mensaje. Por un lado está el ausentismo, la apatía. Y por el otro “la bronca activa” con el voto en blanco y el voto anulado a propósito.

EL VOTO BRONCA GANÓ EN EL 2001 EN ALGUNOS DISTRITOS. 

Argentina tiene un hito histórico en ese sentido. Las elecciones del 2001 fueron una bisagra por la militancia “anti”. Tanto, que el voto en blanco y anulado fue la “segunda fuerza más elegida” ese año. Es más, en algunos distritos el “que se vayan todos” le ganó a los candidatos.

Es lo que ocurrió, por ejemplo, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. La Alianza se dio “por ganador”, con 260 mil votos. Pero hubo 462 mil votos nulos y casi 90 mil en blanco. En la Provincia de Buenos Aires fue parecido. El PJ “ganó” la elección con 1,90 millones de votos. Pero entre votos anulados y en blanco hubo 1,8 millones. Mendoza no fue ajeno al fenómeno. Del total de votantes, el PJ ganó con 187 mil votos. Entre votos anulados y en blanco hubo 164.322.

ES BAJO EL INTERÉS DE LOS ARGENTINOS EN LA POLÍTICA.

Nadie prevé un escenario similar, pero sí de apatía. El contexto no ayuda a entusiasmar. Según una encuesta de la consultora Acierto, el 62% de la población cree que la situación futura del país será peor. La inflación, la corrupción y el desempleo son los principales problemas mencionados. Allí mismo se marca una cantidad de indecisos  de más del 34%. El 70%, además, dijo tener poco o nada interés en la política. Fte. mdz