ALERTA PARA ALBERTO FERNÀNDEZ: LO CUESTIONA FUERTE LA CLASE MEDIA Y PIERDE APOYO DE VOTANTES «BLANDOS»
Lo muestra el último estudio de las consultoras GOP y Trespuntozero. Críticas a la gestión y desencanto entre los propios.
A partir del descenso sostenido en la imagen de la gestión y la figura personal de Alberto Fernández, que arrancó en mayo del 2020 y no se detuvo en el arranque del 2021, las consultoras empezaron a analizar las razones de esa caída y en qué grupos se percibía más claramente. Una nueva encuesta nacional a la que accedió Clarín hace foco justamente en la clase media y en los votantes «blandos» del Frente de Todos. Los primeros critican por encima del promedio al Presidente y su administración; los segundos se muestran desencantados y sin argumentos para defenderlo.
El sondeo que llega a estas conclusiones es de dos firmas que vienen trabajando juntas. El Grupo de Opinión Pública (GOP), que tiene como cara visible a Raúl Timerman, primo del ex canciller y quien trabajó para campañas K; y Trespuntozero, que mide para clientes a ambos lados de la grieta y dirige la analista Shila Vilker.
«En este caso, es lo que llamamos encuesta ómnibus, que se difunde entre distintos tipos de clientes, del mundo empresario y de la política, y una parte se difunde a la prensa», explicaron a este diario desde las consultoras.
El relevamiento se hizo a principios de mes, con 1.850 casos en total, de los cuales 1.040 quedaron englobados como de «clase media». Según detalla el informe, «la categoría utilizada para referir a las clases medias fue la empleada por la Sociedad Europea para la Opinión y la Investigación de Mercados, en función del cruce de dos criterios vinculados con el sustentador principal de la familia: su ocupación y su nivel de estudios».
Cada cuadro y resultado del sondeo se presenta en las dos variables: el total y la clase media. Así, por ejemplo, Alberto Fernández tiene 38,6% de imagen positiva y 58,6% de negativa entre todos los encuestados, pero baja a + 33,9% y – 63,4% entre los de clase media. En este último grupo, por ejemplo, queda peor visto que Mauricio Macri, cuando en la general lo supera.
Algo similar ocurre cuando se detallan las cifras de evaluación de la gestión nacional. En el total, suma + 35,7% y – 57,3%, mientras que entre los de clase media combina + 30,9% y – 63,5%.
Parte de estas diferencias son previsibles si se repasa de entrada el listado de simpatías políticas que enumeran GOP y Trespuntozero. A nivel general, el 28,2% se identifica con «el Frente de Todos de Alberto Fernández, Cristina y Massa», mientras el 22,7% lo hace con «Juntos por el Cambio de Mauricio Macri, Horacio Rodríguez Larreta y María Eugenia Vidal». Pero cuando se discriminan los resultados dentro de los 1.040 de clase media, los oficialistas bajan a 25,5% y los opositores macristas suben a 23,5%.
De todos modos, en la mayoría de los cuadros queda claro que los cuestionamientos exceden la lógica de la grieta. Y hay uno en particular donde las críticas son coincidentes: tanto en el total como en el recorte de clase media el 66,5% opina que el Gobierno «está yendo en la dirección incorrecta».
Además del sondeo global, cuantitativo, las firmas hicieron focus group, cualitativos, con vecinos del AMBA (Ciudad y Gran Buenos Aires). Allí fue donde apareció el desencanto con el gobierno de Alberto Fernández, un fenómeno sobre el que ya vienen advirtiendo otros estudios.
En este caso, GOP y Trespuntozero afirman que el Frente de Todos está perdiendo apoyo del votante «blando», no del kirchnerista más duro que sigue acompañando sin condicionamientos. El tema es central: estos votantes menos fanatizados y más volátiles son los que vienen definiendo las últimas elecciones.
«Los votantes blandos del FdT se muestran alejados del partido que apoyaron en el 2019. Hoy no encuentran argumentos para una afinidad oficialista. Las mediciones de los últimos meses reflejan, en la caída de cercanía con el FdT, el desapego y enojo que expresan sus votantes blandos», se explica en el informe.
Y agrega: «La expectativa se diluye y hoy la evaluación es más negativa que meses atrás. El Gobierno nacional pierde apoyo porque los meses corren y no se ve ningún resultado; ni en materia económica, ni sanitaria, ni seguridad. A los problemas sin resolver se suma una confusión sobre los mensajes oficiales». Fuente Clarìn-Identidad Correntina
