SIN UN PLAN CLARO, NOS HUNDIMOS

POR CARLOS SENA. “Al país lo hacemos entre todos” ¡qué frase! No se preocupe no estamos lanzando nuestro spot de campaña, es una verdad que no la asimila gran parte del pueblo argentino y es una frase, en la que deberíamos reflexionar a partir de este año que todavía es nuevo.

En primer lugar si profundizamos la frase nos daríamos cuenta que todos… somos todos, en esa frase no hay buenos y malos, azules o colorados, Boca o River, esto o aquellos… Ahora bien, ¿cómo es posible salir adelante? cuando la casta política regala subsidios o puestos estatales como si fuesen de su propiedad… y no estoy inventando o ¿ya se olvidó el caso Donda?

Además, recuerda cuando era niño o niña y le preguntaban que quería ser cuando fuera grande, cuantos contestaban doctor, abogado, contador, veterinario, militar o policía, etc.

Lo invito a hacer el intento de preguntarle a cualquier niño al azar para escuchar la respuesta, le aseguro que se va a espantar en más de una oportunidad. Esto es tristísimo para una Nación, no hay expectativas de futuro, no hay una motivación producto de la decadencia educativa en las generaciones contemporáneas y repito con profundo pesar, es lamentable.

En segundo lugar, para esos niños es indispensable y urgente que se retorne a las aulas, no pueden seguir perdiendo tiempo de aprendizaje, los papas no son los maestros idóneos para la enseñanza escolar. Pero si desde la conducción nacional se empecinan en demonizar a cuanto ser humano piense distinto, evidentemente, no estamos en el sendero correcto y algo está fallando. Ésta no es la democracia por la que tanto se padeció a fin de que retorne y si esta era la finalidad de aquellos idealistas que llevaron a cabo sus aportes para la transformación, me parece que nos tomaron el pelo o el mensaje no fue bien recibido.

Hoy no podemos culpar a aquellos personajes del pasado por los desaciertos que tienen los conductores que operan en la actualidad y estos deberían hacerse cargo de los errores a fin de dejar claras las intenciones, si no en definitiva, el camino se torna borroso como quien camina en la neblina, lo que conlleva a tornarnos un país sin credibilidad, con una política endeble y corrupta que no permite el progreso de su pueblo, obstaculizando el camino al desarrollo, volviéndonos un país aislados y por consiguiente, inviables.

Es dable mencionar que tras una “cuarentena XXL” la economía ha sido vapuleada lógicamente, el desempleo creció y la pobreza avanza a pasos agigantados, no son datos menores y a pesar de ello, en el Gobierno impera la apatía o las soluciones “flash”: maquinita de billetes y/o subsidios. Ahora bien, sabemos que la pandemia del COVID 19 tiene acalambrada la vida económica del mundo entero, pero… ¿Hay un plan para salir adelante? No pareciera existir dicho plan y sin un plan claro, nos hundimos.