¿A DÓNDE VAMOS CUANDO NO SABEMOS A DÓNDE VAMOS? POR CARLOS SENA
La pregunta del millón es ¿Sabe el Presidente y su equipo económico a dónde vamos? ¿Estamos a la deriva total? ¿Existe riesgo de llegar a las puertas de una Hiperinflación?
El rumbo económico está tomando un horizonte oscuro, como mínimo.
Carlos Sena. Dicen los que saben que las empresas que han iniciado su éxodo del país son más de las que nos enteramos por los medios hegemónicos, una tremenda recesión y el acrecentamiento de la brecha cambiaria, hacen sacar canas verdes a aquellos que les quedaba una cuota (MUY MÍNIMA) de confianza en nuestro país.
La confianza, factor fundamental para hacer crecer el desarrollo económico de una Nación, es un bien muy escaso por estos días y me atrevo a decir que aunque el Presidente y todo su equipo se desvelaran por sembrarla, no lo lograrían. Como se dice vulgarmente, la están corriendo desde atrás… desde muy atrás.
La pregunta del millón es ¿Sabe el Presidente y su equipo económico a dónde vamos? ¿Estamos a la deriva total? ¿Existe riesgo de llegar a las puertas de una Hiperinflación? Las respuestas a estos interrogantes parecen cada día más difícil de encontrarlas y a lo que es peor, me parece que no somos los únicos que no encontramos las respuestas. Usted, mi estimado lector y yo, estamos siendo espectadores de lujo de una crisis sin precedentes en la historia Argentina, mal que le pese a quien corresponda y esto no es lo peor, lo peor es que todo este balurdo genera la aparición del fantasma económico tan temido, la desconfianza, que no es otra cosa que la ausencia de confianza.
La confianza, es un tema que nadie logra entender bien de qué se trata y mil interrogantes surgen, como por ejemplo ¿quién mide la confianza? O ¿de qué se trata mal que nos aqueja cuando ella está ausente en nuestros inversores? Pues bien, vamos a hacerlo simple y para ello le propongo un mini juego, imaginemos juntos: Tenemos un dinerito, debemos poner un kiosko con el fin de obtener ganancias para ganar la partida y las reglas de juego nos permiten poner nuestro capital en cualquier país de Sudamérica. La pregunta es la siguiente ¿Cuál país elegimos teniendo en cuenta la situación de cada uno? Iniciemos por descartar los primeros tres en los que no invertiríamos nuestro capital -¿lo pensó?- bueno si entre esos tres que eligió para no poner su capital está la Argentina, usted sufre del mal del momento: tiene falta de confianza en nuestro país.
Ahora bien, si tenemos falta de confianza en nuestro país, nosotros que somos de acá, que somos de raza argentina, bien curtidos por las crisis que cada dos por tres nos llevan puestos y la tenemos clara… ¿Por qué un inversor extranjero debería confiar en nuestro país? Si ni siquiera le podemos responder una simple pregunta ¿A dónde vamos cuando no sabemos a dónde vamos?. Multimedios Prisma.