LA EX PRESIDENTA SE PRESENTÓ ANTE EL JUEZ FEDERAL BONADÍO CON ÍNFULAS DE GRANDEZA ¿QUÉ PASA POR LA “HONORABLE” SENADORA?
En una extraña maniobra, Cristina Fernández pidió la nulidad del caso y recusó al fiscal Carlos Stornelli y al juez Claudio Bonadio. ¿Está fuera de la realidad que la rodea?¿Hasta dónde seguirá el circo jurídico que monta la jefa?¿cómo lo ve el pueblo?
Por David León. La Senadora se presentó este lunes y en un acto de arrojo, como quién se queda acorralado y sin recursos, comenzó a repartir responsabilidades (mediante 3 escritos), que – a su criterio – recaen sobre las personas investidas con la autoridad suficiente que otorga el Poder Judicial de este país, para indagarla por las diversas causas que la apuntan como “Jefa de un asociación ilícita”. Las personas a las que centró en su mira son, nada más ni nada menos que el señor fiscal Carlos Stornelli y el señor juez Claudio Bonadio, no conforme pidió la nulidad del caso por sentir que están atentando contra su persona, acusando ser víctima de una persecución política por parte del actual gobierno. Por si alguno le queda alguna duda de que la doctora se siente una perseguida política, pues simplemente miren en su cuenta de Twitter lo que expresa a vista de “todos y todas”:
TWITTER DE LA DOCTORA:
Desde el 10 de diciembre de 2015 me armaron seis causas penales y todas ellas fueron radicadas en Comodoro Py. De las seis, cinco fueron iniciadas e impulsadas por Bonadío. ¿Milagro? No. ¿Fórum shopping?
Al respecto digo, la viuda de Kirchner: – ¿se encuentra fuera de la realidad que la rodea?, creerá que es la dueña de la verdad O simplemente, es una maniobra jurídica para sacar la pelota de la cancha y rearmar su estrategia, como cuando un equipo de futbol se ve agotado y acorralado contra su arco -, la cuestión que todo el circo que está montando pareciera una verdadera tomada de pelo a la Justicia de la Nación y al pueblo argentino que espera con ansias una definición justa sobre las causas que la involucran.
Sin embargo, la señora sigue siendo vitoreada por otro sector del pueblo que pareciera seguirla incondicionalmente, sin importarles las acusaciones serias que la involucran y que la idolatran como si se tratara de una “semi diosa” o “la salvadora del pueblo”.
Lo cierto es que la definición se tarda en llegar, como ocurre con todo proceso judicial, es lento, tedioso y en contrapunto todo el pueblo argentino espera una definición, ya sea para un lado o para el otro.
