sábado 23 de noviembre de 2024 02:31:11

CASO NISMAN: Los Peritos en ciencia forense no pueden decir si fue un crimen o un suicidio

Los peritos criminalísticos oficiales y de parte que entregarán su informe el martes le solicitarán a la fiscal que reúna a los miembros de ambas juntas

 0000411262En 21 páginas, Osvaldo Raffo y Julio Ravioli, los peritos médico forenses designados por la querellante Sandra Arroyo Salgado, ex mujer del fiscal Alberto Nisman, le explicaron a Fein en su informe en disidencia de la Junta Médica, porqué no se puede sostener con “certeza pericial” la hipótesis de homicidio únicamente desde una interpretación médico legal. En efecto, los peritos criminalísticos oficiales y de parte que entregarán su informe el martes le solicitarán a la fiscal que reúna a los miembros de ambas juntas.

Se sabía que los peritos oficiales habían señalado en su presentación que no existía evidencia física para sostener que a Nisman lo mataron, como se afirmaba en el informe de la querella presentado el 5 de marzo. Ese documento, sin embargo, no se realizó desde una mirada únicamente médica, sino que intercaló razonamientos médicos con los criminalísticos, para llegar recién entonces a la conclusión del homicidio.

Otro detalle clave: la afirmación “no existen aspectos médico legales que sostengan en sí mismos la hipótesis del homicidio”, que está presente tanto en el informe de la querella como en el acordado por la Policía Federal, el Cuerpo Médico Forense (CMF) y Mariano Castex –por la defensa de Diego Lagomarsino–, existe porque la fiscal preguntó específicamente por la opción del homicidio y no por la del suicidio.

“¿Cuáles de las observaciones contenidas en los aspectos médico-legales de informe –y que no tengan que ver con el aspecto criminalístico– esto es, en forma individual o en conjunto, resultan indicativas con certeza pericial que el fallecimiento de quien en vida fuera Nisman se debiera a un acto homicida?”, preguntó Fein a la Junta.

Según el informe al que accedió Clarín, los médicos de la querella dicen que “es imposible aproximar a un diagnóstico en la investigación de la muerte violenta si no se asocia el examen del lugar del hecho con la posterior autopsia” y argumentan: “Es bien sabido que la autopsia comienza en el lugar del hecho (…) Por lo tanto, si por aspectos médico-legales se entiende la autopsia, la respuesta terminante es no. No se puede aproximar un diagnóstico con el solo hecho de haber realizado la autopsia médico legal”.

Para sostener esta premisa, Raffo y Ravioli citan, entre otra bibliografía, un trabajo de Fernando Trezza, miembro del CMF presente en la autopsia a Nisman. A lo largo de todo el informe, los peritos mencionan a Trezza, inclusive para explicar su interpretación del concepto de rigidez cadavérica, aspecto relacionado directamente con la estimación de la data de muerte.

Es que establecer el momento en que murió Nisman fue uno de los debates más extensos de la junta médica. Y en efecto, tras esas intensas discusiones, los peritos de la querella y los oficiales coincidirían en un punto de su análisis. ¿Cómo? El horario máximo que la querella sostiene como posible para la muerte de Nisman coincide con el que los oficiales establecen como mínimo. Ese punto de encuentro es el domingo a la mañana.

La data de la muerte, además, sería uno de los puntos que la fiscal Fein encontró más flojos en la argumentación de los peritos de Arroyo, y hasta habría detectado errores en la cita bibliográfica mencionada por estos en su presentación del 5 de marzo.

Pero no todas fueron diferencias entre los médicos de la querella y los oficiales. Unos y otros coincidieron en que Nisman agonizó durante “unos minutos”, y al no haber muerte inmediata tampoco hubo espasmo cadavérico.

“No fue una muerte inmediata como sostuvo el perito informante de la autopsia en la declaración testimonial del día 22 de enero pasado”, afirman Raffo y Ravioli en la página cuatro de su presentación. La declaración a la que hacen alusión es la respuesta que da el doctor Héctor Di Salvo, a cargo de la autopsia, cuando Fein le preguntó si teniendo en cuenta su experiencia y teniendo en cuenta la presencia de espasmo cadavérico, se puede determinar y en qué porcentaje que “se trató de situaciones de disparo auto-provocado”. Lo que explicaron los peritos de parte en su informe es que “las fotografías tomadas en la autopsia demuestran que no hubo una destrucción masiva del sistema nervioso”, como había declarado Di Salvo.Fte.clarín