NO HAY ORDEN DE ESPIAR FISCALES DIJO LA FUNCIONARIA INVOLUCRADA
Según el fiscal Troncoso, la funcionaria Pzellinsky accedió a sus dictámenes de manera ilegal. «Accedemos a dictámenes e información para trabajar en forma articulada. Eso fue lo que sucedió. Como artilugio defensista, el fiscal presenta esa denuncia totalmente inconsistente», señaló la colaboradora de Gils Carbó
Romina Pzellinsky, la funcionaria de la Procuración General denunciada por supuesto espionaje, reconoció hoy que desde su área accedieron a los dictámenes del fiscal de instrucción César Augusto Troncoso, aunque advirtió que no se trató de una práctica ilegal.
En declaraciones radiales, Pzellinsky, a cargo del Programa de Políticas de Género, una oficina creada en 2012 por Alejandra Gils Carbó , aseguró que «no hay ninguna orden de espiar a fiscales» y acusó a Troncoso de actuar con un «patrón sistemático y metódico» para archivar causas de violencia de género.
Tras una denuncia de Troncoso, el fiscal federal Guillermo Marijuan inició una investigación para determinar si desde la Procuración se espiaron dictámenes de causas en trámite en los que trabajaba un colega suyo. Por ese motivo pidió datos de los servidores informáticos de la Procuración General de la Nación para determinar si funcionarios del organismo realizaron espionaje a través de la red informática.
Según el fiscal Troncoso, la funcionaria Pzellinsky accedió a sus dictámenes de manera ilegal. «Accedemos a dictámenes e información para trabajar en forma articulada. Eso fue lo que sucedió. Como artilugio defensista, el fiscal presenta esa denuncia totalmente inconsistente», señaló la colaboradora de Gils Carbó.
Pzellinsky argumentó que una reglamentación aprobada por la Procuración General le da al programa de violencia de género facultades para acceder a las causas mediante Fiscalnet. Y advirtió que lo hizo en el marco de un convenio con la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte.
«Esto es una acusación en contra de una política criminal instalada en esta gestión», indicó la funcionaria.
En una entrevista con la radio Nacional Rock, añadió: «No hay ninguna orden de espiar a fiscales».
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Enseguida, agregó: «No hay intromisión indebida en ninguna computadora. Es un sistema de gestión de causas que hoy tiene el Ministerio Público».
Tras una denuncia de Troncoso, el fiscal federal Guillermo Marijuan inició una investigación para determinar si desde la Procuración se espiaron dictámenes de causas en trámite en los que trabajaba un colega suyo. Por ese motivo pidió datos de los servidores informáticos de la Procuración General de la Nación para determinar si funcionarios del organismo realizaron espionaje a través de la red informática.
Según el fiscal Troncoso, la funcionaria Pzellinsky accedió a sus dictámenes de manera ilegal. «Accedemos a dictámenes e información para trabajar en forma articulada. Eso fue lo que sucedió. Como artilugio defensista, el fiscal presenta esa denuncia totalmente inconsistente», señaló la colaboradora de Gils Carbó.
Pzellinsky argumentó que una reglamentación aprobada por la Procuración General le da al programa de violencia de género facultades para acceder a las causas mediante Fiscalnet. Y advirtió que lo hizo en el marco de un convenio con la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte.
«Esto es una acusación en contra de una política criminal instalada en esta gestión», indicó la funcionaria.
En una entrevista con la radio Nacional Rock, añadió: «No hay ninguna orden de espiar a fiscales».