sábado 23 de noviembre de 2024 02:12:07

Cristina afirmó que Argentina recibe recibe «misiles y bombardeos»

«Cada vez que la Argentina se torna viable y ha tomado una autonomía razonable comienzan los misiles y bombardeos permanentes», se quejó ayer durante un acto en la Casa Rosada, en el que mantuvo sin cambios su posición respecto de la negociación con los fondos buitre, hoy completamente estancada.

argentina-en-default-1924676w300La presidenta Cristina Kirchner ratificó surechazo a la negociación propuesta por el juez de Nueva York, Thomas Griesa, y aunque consideró que pasaba por un momento «difícil», minimizó los efectos en la economía deldefault selectivo en el que cayó el país ante la imposibilidad de concretar los pagos de deuda por decisión judicial.

«Cada vez que la Argentina se torna viable y ha tomado una autonomía razonable comienzan los misiles y bombardeos permanentes», se quejó ayer durante un acto en la Casa Rosada, en el que mantuvo sin cambios su posición respecto de la negociación con los fondos buitre, hoy completamente estancada. «Estamos para poner el pecho a las balas en los momentos difíciles, con mucha tranquilidad», agregó.

La Presidenta siguió el camino discursivo que había anunciado la semana pasada por cadena nacional, cuando remarcó que no pagará una sentencia que calificó de «usuraria» y sostuvo que los fondos del Estado nacional serán destinados a salud, educación y obra pública, en una forma de ratificar que no accederá a firmar ningún acuerdo con los fondos buitre que litigan contra la Argentina.

«Algunos intentan decir que se viene el mundo abajo y que todo va a ser horrible y espantoso. Nosotros vamos a seguir trabajando como lo hicimos siempre, que es lo que mejor sabemos hacer. Por ahí nos equivocamos ¿Pero saben qué? Nos equivocamos porque laburamos, nunca nos equivocamos por no hacer nada», amplió.

Habló, además, de los OPM, según su versión de esa sigla, «los otros ponen la mosca», una variable que ideó de la Organización Política Militar. Pareció una nueva crítica a los bancos argentinos que, con Jorge Brito a la cabeza, la semana pasada dejaron correr las versiones de un supuesto acuerdo para comprar la deuda a los fondos buitre y salvar así al país del default. «Nos importa ponerla [la plata] cuando es para esto», apuntó, sobre las obras que había anunciado minutos antes.

Cristina Kirchner presentó ayer el llamado a licitación de la segunda etapa del Gasoducto del Nordeste, un crédito de la Comisión Andina de Fomento por 200 millones de dólares para conectar la red de gas, además de una serie de convenios referidos a los ministerios de Ciencia y Tecnología y de Salud, como reformas para el Hospital de Clínicas y la ampliación del Instituto de Oncología Ángel Roffo.

La Presidenta aprovechó la temática para dar clases de enfermedades y bromeó sobre su futuro cuando deje la Casa Rosada. No pondrá un café literario, como alguna vez ironizó Néstor Kirchner cuando se terminó su mandato, sino que lo de Cristina va por el lado de la salud. «Ya verán a qué me voy a dedicar después del 10 de diciembre», anunció entre risas, poco antes de comenzar a hablar de los efectos que le había provocado el virus estafilococo -viene muy fuerte-, apuntó, cuando tuvo su última laringofaringitis aguda.

RETO A LA DISTANCIA

Aunque se mostró distendida, no parecía estar del mejor humor. La Presidenta retó a uno de sus interlocutores en las tres videoconferencias que hizo, el secretario de Determinantes de la Salud y Relaciones Sanitarias, Eduardo Bustos Villar, que no paraba de hablar y no la dejaba preguntar. Cuando por fin tuvo su tiempo para sacarse las dudas, Cristina se olvidó de lo que le quería decir. «Habló tanto que ahora me olvidé de lo que le quería preguntar», se quejó.

Aunque no fue el tema central de su discurso, la Presidenta retomó las críticas al fallo de Griesa, aunque sin nombrarlo. No dijo nada del mediador Daniel Pollack, que fue impugnado por el Gobierno por considerar que manifestó una posición a favor de los fondos buitre. Pero entre todos los anuncios Cristina aprovechó para colar el debate de la deuda. «Quiero convocar a los argentinos a defender estas cosas que son para el futuro y para no volver atrás nunca más», apuntó.

La Presidenta contó, además, una anécdota que le relató el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos. Tampoco lo nombró, pero dio las pistas necesarias para detectar que apuntaba a él, que pasado mañana asumirá su segundo mandato. En esa charla, su par le confesó que en una clase de economía, un importante líder (a quien tampoco identificó) le había dicho que si en el mundo se terminaban las relaciones comerciales internacionales, el único país que podría sobrevivir era la Argentina. «No somos los mejores del mundo, pero tenemos capacidades, energía, agua potable, territorio y recursos humanos. Esto puede ser una amenaza» para los países centrales, cerró