#Fracacerolazo del 13M en Argentina
La convocatoria ciudadana del 13M crítica al Gobierno no fue la misma de antes en Argentina, donde justamente se agudizan los casos de corrupción, inseguridad e inflación. El #Fracacerolazo.
La convocatoria ciudadana del 13M crítica al Gobierno no fue la misma de antes en Argentina, donde justamente se agudizan los casos de corrupción, inseguridad e inflación. El #Fracacerolazo.
A diferencia de las ?manifestaciones anteriores, la convocatoria a movilización y cacerolazo en el Obelisco y distintos puntos del país fue, como muchos defensores del modelo kirchnerista bautizaron en las redes sociales, un #fracacerolazo.
No tuvo un inicio feliz, debido a que fue convocada con al menos dos meses de anticipación, y hasta el día de ayer, ningún medio reflejó la convocatoria realizada a través de las redes sociales, ni siquiera el mismo día que el juez Norberto Oyarbide (quien falló en varias ocasiones a favor del Gobierno) confesó que fue intimidado por funcionarios directos de la presidente de la Nación (es decir otro poder).
El 13 de marzo hubo tímidas manifestaciones de ciudadanos en rechazo a las prácticas deshonestas de un Gobierno que no es perfecto, pero que tampoco se esfuerza en serlo. Cuyos defectos radican más en sus intenciones que en sus capacidades. Y fue recordado (acertadamente) por los defensores del modelo como #Fracacerolazo.
Y anochecía en Buenos Aires, con sus bares y lugares de esparcimiento colmados de consumidores, como si fuera una noche más sin nada que contar ni recordar, y a la madrugada, quedarían las sobras de un abundante menú… y las sobras de lo que fue la tragedia de Once… las sobras de la inseguridad… de la corrupción… del hambre de agua… de las valijas de Lázaro… de la mentira de la inflación… de los presupuestos sin explicación… del narcotráfico liberado… sobras de todo menos de la indignación ante la injusticia.