PARAGUAY: Tras la destitución de Lugos Argentina retiró a su embajador
Foto de archivo embajador Rafael Roma. «Frente a los graves acontecimientos institucionales ocurridos en la República del Paraguay que culminaron con la destitución del Presidente Constitucional Fernando Lugo y la ruptura del orden democrático, el Gobierno argentino ha dispuesto el inmediato retiro de su embajador en Asunción», señaló hoy la Cancillería en un parte de prensa.
El comunicado agregó que la representación diplomática de la Argentina en Paraguay quedó bajo el ala de un encargado de negocios «hasta tanto se restablezca el orden democrático en dicho país».
En tanto, países de la Unasur ratificaron su condena a la destitución del mandatario paraguayo y juzgaron «clave» la cumbre de presidentes del Mercosur que la semana próxima se celebrará en Mendoza para definir los pasos a seguir frente a lo que consideraron un «golpe de Estado» en esa nación.
La presidenta Cristina Fernández confirmó hoy a través de Twitter que «lo sucedido es un ataque directo a las instituciones» y reiteró que «Argentina no va a convalidar el golpe en Paraguay».
La primera dama uruguaya y senadora, Lucía Topolansky, evaluó que la reunión de Mendoza, donde se debería traspasar la titularidad pro témpore del Mercosur a Paraguay, «será de índole mucho más política de lo que pensábamos. Nos debemos defender todos: hoy por ti, mañana por mí».
El nuevo presidente de Paraguay, Federico Franco, anunció que instruyó a su Cancillería a tomar contacto con todos los países de la región para «suavizar y mantener relaciones armónicas», aunque ratificó la negativa de su país a aceptar la inclusión de Venezuela como socio del bloque regional de comercio.
Franco, quien asumió después de que Lugo fuera destituido por una abrumadora mayoría del Senado por «mal desempeño en sus funciones», admitió que le «preocupa» que ningún mandatario sudamericano haya manifestado un aval a su gestión.
Si bien no anticipó si concurrirá a la cumbre que se desarrollará en suelo mendocino, ratificó que mantendrá su posición de rechazar el ingreso de Venezuela al Mercado Común del Sur.