ECONOMIA: En lo que va del año, la devaluación del peso frente al dólar ya superó la marca de 2010
En el cuadro se puede observar el comportamiento estimado del Banco Central en los distintos meses del año. El año electoral, pese a que las primarias hayan disipado incertidumbres, trajo un trabajo extra al Banco Central para mantener al dólar. Ante la aceleración en la demanda, señalan los analistas, la entidad debió posicionarse como vendedor para moderar las oscilaciones y controlar a la divisa.
En lo que va del año, la devaluación del peso frente al dólar ya superó la marca de 2010. En enero, la cotización era de 4,01 pesos por cada unidad; ahora, llega a los $ 4,23. Es decir, la moneda local perdió un 5,4% de valor frente a la extranjera.
En todo 2010, el alza había sido menor, del 4,69%, desde los $ 3,83 hasta poco más de 4 pesos. Pero en 2009, con los comicios legislativos de por medio, la devaluación había superado el 10%.
A esta altura, el dólar ya superó lo pronosticado por Marcó del Pont, que había afirmado en enero: “El dólar cerrará 2011 en $ 4,20 tal como lo proyectamos”. Ese umbral fue traspasado el 19 del mes pasado.
Tanto hacia atrás como en el presente, el Banco Central dirigido por Mercedes Marcó del Pont intervino en el mercado para evitar sobresaltos y sostener una política de “flotación administrada”. En el corriente año, si bien el saldo de sus intervenciones sigue siendo positivo, el BCRA tuvo un rol más activo en los últimos meses para evitar que el precio de la moneda norteamericana se elevara. Algo que “no escapa a lo previsto”, según los dichos de la presidenta de la entidad.
Sin embargo, el Central no quiere comprometer su nivel de reservas (por encima de los US$ 50.000 millones), por lo cual requirió la ayuda de otros organismos públicos. La administradora de los fondos previsionales (Anses) y el Banco Nación también salieron a ofrecer parte de sus dólares, para aliviar la carga a la autoridad monetaria. La ayuda no pudo evitar que las reservas cayeran.
Pese a los esfuerzos, y con una sutil devaluación del real de por medio, el billete verde escaló en agosto a su mayor ritmo en poco más de dos años: se deslizó cinco centavos al alza . Y alcanzó los 4,44 pesos en el mercado paralelo, desde los $4,34.
Los vaivenes del mercado de divisas obligaron al Banco Central a pararse de un lado u otro, en función de la oferta de dólares. Según datos relevados por Puente Hnos y entregados a La Nación , marzo fue el pico de ingreso de dólares al país, que requirió una fuerte presencia en la compra de divisas. En cambio, en el mes de las Primarias, la venta hizo que el Central tuviera que desprenderse de más de 700 millones de dólares. Algunos cálculos estiman que la cifra llegó hasta los US$ 900 millones, sumados a la ayuda de la Anses y el Banco Nación, que la elevaría a US$ 1100 millones.
Con respecto a los movimientos del Banco Central, Mario Sotuyo, de la consultora Economía y Regiones, advirtió que hay que tener en cuenta diferentes variables que acaban por determinar con cuánto tiene que intervenir para mantener el dólar a raya. “El Banco Central compra la entrada neta de divisas para sostener el tipo de cambio alto. Y la entrada de divisas está dada por la diferencia entre la cuenta corriente y la cuenta capital. Ahora, con el aumento de la inflación, la cuenta corriente (que incluye el saldo de la balanza comercial) tiende a ser deficitaria y sólo va a haber entrada neta de dólares si la cuenta capital compensa con creces a lo que sale por cuenta corriente”, explicó el especialista. Y aclaró: “En la cuenta capital ingresan dólares de la inversión extranjera directa y de los préstamos privados y públicos (a provincias), pero salen divisas por la fuga de capitales”.
Este año, se espera que la salida de capitales ronde los US$ 17.000 millones , muy lejos de los US$ 11.400 millones fugados en 2010. Fte.lanacion.com.ar, textual