martes 23 de abril de 2024 12:26:54

POLITICA: Los Borrachos del Tablon habrían cerrado un trato con Facundo, hijo del jefe de la CGT y líder de la Juventud Sindical

Daniel Passarella no podía creer lo que le estaban contando.

Cuando el martes ya se hacía de noche, desde la zona de quinchos se escuchaban gritos, carcajadas sonoras y choque de copas regadas por la viña del Señor. Se sabe, la barra de River se sigue moviendo por el club a sus anchas pero con la orden de hacerlo con un perfil mucho más bajo que en la época de José María Aguilar.

Sorprendido, envió a tres emisarios a ver qué ocurría: Jajo, hombre cercano a la barra acercado por su hijo, el Chino (su nombre de pila es José, es amigo del Kaiser y trabaja de taxista) y Pecho. Lo que escuchó de ellos no le gustó nada: en los quinchos unos 50 barras departían alegremente con un grupo de militantes de la Juventud Sindical, liderado por Facundo Moyano.

Con el fantasma de lo ocurrido en esa zona en febrero de 2007 (la famosa gresca de los quinchos), Passarella cortó por lo sano y llamó a la comisaría 51 para que manden una brigada a echar a los barras y los sindicalistas. Pero la Policía tardaba en llegar

Nervioso, hizo contacto hasta con Gendarmería hasta que al final, apareció la Federal. Fue hasta la zona, los barras mostraron sus carnets, el menor de los Moyano tiró su chapa y aquí no ha pasado nada. Encima, el lugar lo había pedido por nota oficial al club y tenían una copia. Ahora el Kaiser está viendo quién lo autorizó, aunque todas las miradas apuntan a un hombre apenas por debajo suyo. Así, aún contra la opinión de Passarella que no quiere saber nada con tener a los violentos adentro, el cónclave siguió adelante. Y dos horas después, todo se coronó con un brindis.

¿Qué acordaron? Que Los Borrachos del Tablón harán de fuerza de choque de la Juventud Sindical, metiendo gente en los actos y actuando también como seguridad. Nada nuevo cuando se está en etapa electoral y mucho menos si se recuerda que esta misma barra de River, encabezada por Martín de Ramos, había pactado con el Gobierno mostrar telones en la cancha a favor del Fútbol para Todos a cambio de 50.000 pesos y salir del derecho de admisión, lo que lograron.

Lo que no sabía Facundo Moyano, capo del sindicato de los trabajadores de peajes, es que se entrometía en la interna de la barra pero también desataba una familiar: Pablo, el hermano mayor, secretario general del gremio de Camioneros, estaba en tratativas para sumar a las movilizaciones de la CGT que lidera Hugo, su padre, a la otra fracción de la barra, la del Oeste, rival de la oficial.

A esta llegó por consejo de los capos de la tribuna de Independiente, con quien los Moyano tienen relación fluida, a punto tal que compartieron con ellos el Mundial de Sudáfrica 2010, incluyendo un safari por el parque nacional de Pilanesberg, cerca de la frontera con Botswana.

Ahora el safari es de otro tipo. Y Los Borrachos, están a la caza. Por Luis Sangiorgio