ECONOMIA: La suba de los precios del petróleo está llevando nuevamente a los mercados a una zona de incertidumbre
ARTICULO PRODUCIDO POR EL DR. RODOLFO ROSSI RECONOCIDO ECONOMISTA EX PRESIDENTE DEL BCRA, PARA PRISMA.
La suba de los precios del petróleo está llevando nuevamente a los mercados a una zona de incertidumbre. El fantasma de la crisis del 2008, cuando el barril de crudo superó los US$ 147, está presente.
La OPEP (Organización de Países Exportadores de Petróleo) muestra preocupación por los niveles que está alcanzando el precio del crudo WTI, que se apreció 24,6 % desde comienzo del año (de US$ 89,84 a US$ 111,92 el barril).
El WTI (West Texas Intermediate) es un valor promedio del petróleo producido en los campos occidentales del Estado de Texas, EEUU, es utilizado como referencia de otros petróleos crudos producidos en Medio Oriente y América Latina. El petróleo Brent lo es para Europa.
La referencia crucial actualmente, es intuir dónde estaría el límite de la suba de los precios a partir del cual, la demanda de petróleo se podría resentir y afectar negativamente los precios.
Al contrario con la situación del 1° semestre del año 2008, la economía del mundo aún no se ha recuperado totalmente de la crisis y muchos países están debilitados.
Sin embargo, los firmes precios actuales del petróleo ya estarían dañando la economía de los países consumidores y, en especial, de las naciones más pobres. En África, de permanecer los precios del crudo por encima de US$ 100 el barril, se estima que más del 5 % de su PBI será necesario para cubrir sus importaciones. En otro extremo, en China, los camioneros afectados por el alza de los combustibles, están paralizando el puerto de Shangai.
Los elevados precios del petróleo, ligados a la “debilidad del US$” y en menor medida a la violencia e inestabilidad política en el Norte de África y Oriente Medio, retroalimentan los riesgos de inflación y alientan a los inversores hacia las colocaciones que sirven de refugio, como los metales preciosos.
Indudablemente, el alza del petróleo incide directamente en el precio de los alimentos, fertilizantes y fletes, que se reflejan en el costo final de los productos agropecuarios y también industriales.
Lo anterior se traduciría, a su vez, en una caída del PIB mundial, por la menor propensión al gasto, reduciendo el comercio internacional.
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), un incremento permanente de 5 dólares en el precio del petróleo, reduciría en 0,25 % el crecimiento mundial, aunque el efecto variará de un país a otro, en función de su dependencia y la intensidad de su consumo.
El FMI considera adicionalmente que las presiones inflacionarias se acumularían, especialmente, en los países en desarrollo, a medida que la gente presione por salarios más elevados atento, los mayores precios de los alimentos y combustibles.
Según el World Economic Outlook del FMI, de Abril de 2011, la escasez de energía continuaría en los próximos años. El FMI prevé un crecimiento en los precios del petróleo de más del 50 % en un año y más de un 80 % en los próximos 5 años. Las causas de este incremento son que el crecimiento de la producción, no está en condiciones de satisfacer la demanda global. En las simulaciones más favorables, el precio del petróleo se incrementaría como mínimo un 60 % en cinco años.
En el medio plazo, la capacidad para incrementar la producción de petróleo, es muy baja, por lo que no sería posible contener los precios.
Negativo pronóstico. Para pensarlo.